La palma aceitera y el futuro de los orangutanes

Poco se sabe del uso que tiene la palma aceitera en la vida diaria y normalmente las noticias que se difunden de este cultivo están relacionadas al impacto que ha tenido su expansión en la deforestación de los bosques en muchos lugares del mundo, algunos de los cuales son hábitat de los orangutanes que ahora están en peligro.

Sin embargo, el aceite de palma es insumo para la fabricación de pasta dental, cereales, detergente, fideos instantáneos, vitaminas, entre otros productos importantes y necesarios para millones de personas.

Por ello, investigadores de la Universidad de Bach y la Universidad de York en el Reino Unido, han creado un nuevo proceso para que la levadura Metschnikowia pulcherrima produzca un aceite espeso que es muy similar al aceite de palma, según reporta una completa nota de Fastcoexist. Los investigadores han descubierto que dicha levadura se puede cultivar en condiciones no estériles en una variedad de desechos agrícolas y alimentarios como el miscanthus, paja de colza, algas, y paja de trigo, tal como afirma el Africa News.

Ya ha habido otros intentos para producir aceites similares al de palma de forma más sustentable, debido a la desaparición del 80% del hábitat de los orangutanes en los últimos 20 años. En el 2015, la tala y quema ilegal de bosques han generado incendios forestales que han puesto en peligro a un tercio de la población de estos animales. Además, estos incendios han tenido también efectos económicos causando aproximadamente USD 9 mil millones en daños.

Rod Scott, líder del Departamento de Biología y Bioquímica de la Universidad de Bach dice que el uso extenso del aceite de palma se debe a dos de sus propiedades: un punto de fusión excepcionalmente alto y niveles muy elevados de saturación, lo cual lo hace saludable. Si bien hay otros aceites que tienen estas propiedades individualmente, hasta ahora no se había obtenido uno que tuviera los dos al mismo tiempo.

La iniciativa ha recibido USD 6.3 millones de apoyo por parte del gobierno del Reino Unido y ahora los investigadores están pensando hacer más grande su proyecto, primero con bio-reactores de 30 litros, para luego llevar el proceso a escala industrial.

Se estima que pasarán muchos años antes de que este aceite pueda ser comercializado y con suerte, aun se estará a tiempo de evitar la extinción de orangutanes que si no se hace nada, los expertos afirman que podrían desaparecer para el 2023.