Las perspectivas de la industria de carga marítima

Ver el movimiento que caracteriza cualquier puerto es el reflejo de la salud de una economía. Algo así está ocurriendo en los puertos chinos donde se puede observar barcos entrando y saliendo llenos de cargamento en cada momento, con muy poco tiempo de espera. A quién se le podría ocurrir que hay algo que no está yendo bien. Sin embargo, de acuerdo a un artículo publicado recientemente por Bloomberg y denominado “The Shipping Industry Isn't Doing as Well as It Looks from Space” esta floreciente industria no estaría generando las ganancias que producía en otros tiempos.

Todo parece indicar que el problema viene de atrás, y se remonta a los inicios de los noventas, con el boom en la industria, que motivó a los empresarios del sector a duplicar sus flotas para poder solventar la demanda existente. Hoy esas empresas están a la caza de carga porque de lo que se trata es de poner los números en azul, en un contexto de desaceleración de las economías que ha impulsado los precios de los commodities a la baja y ha reducido los flujos de mercancías a nivel mundial.

Como consecuencia de ello, en los últimos años se han tenido que destruir y dejar grandes cantidades de barcos cargueros viejos de lado e incluso eso no resulta tan sencillo. Los dueños tienen dos opciones según el artículo: dejarlos en un puerto grande esperando poder hacerse con un cargamento importante, o seguir manejando sus barcos y no ganar nada con ellos.

La legislación hace que sea sumamente costoso  aparcar una embarcación y su tripulación, lo que además demanda un largo proceso administrativo. Además, activar un carguero luego de varios meses de inactividad tampoco es sencillo. Por ello, el artículo añade que según estudios realizados por el mismo Bloomberg, casi todos los cargueros terminarán en rojo este año y es probable que para 2017 casi no ganen nada de ganancias tampoco.

La crisis ha afectado incluso a la velocidad en que los barcos se movilizan. Este año se ha mostrado una velocidad promedio de 8.6 nudos, respecto a los 8.78 nudos del año pasado, y peor aún, comparados con los 11 nudos del 2009.

En resumen, la crisis que está aquejando a la industria carguera se está dando en casi todos los niveles. A las grandes figuras de este negocio les queda analizar cómo serán los años por venir y en todo caso reevaluar sus opciones.