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Harina contra la anemia

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La norma aprobada permite a los fabricantes añadir hasta 0.7mg de ácido fólico por cada libra de harina de maíz.
19 de abril de 2016
Red star
Por qué es importante
La adición de ácido fólico a la harina de maíz podría aumentar el consumo de ácido fólico y esto reducirá el riesgo de nacimientos con defectos del tubo neural.

En una decisión que tomó 4 años en ser tomada después de haber recibido la petición conjunta de seis organizaciones- Gruma Corp, Royal DSM NV, Fundación March of Dimes (MODF), Asociación de Espina Bífida (SBA),  Academia Americana de Pediatría (AAP) y el Consejo Nacional de la Raza (NCLR), las Food and Drug Administration (FDA) aprobó la fortificación de harina de maíz con ácido fólico.

De acuerdo a la norma aprobada, los fabricantes podrán añadir hasta 0.7 mg de ácido fólico por cada libra de harina de maíz. Como se sabe, el ácido fólico es una forma de vitamina B que puede ayudar a prevenir malformaciones congénitas del tubo neural-las cuales son malformaciones congénitas que afectan el cerebro, la columna vertebral y la médula espinal-y entre los cuales están:

  • Espina Bífida: ocasiona debilidad en los músculos, parálisis, pérdida sensorial de las piernas y/o pobre control del intestino y vejiga.
  • Anencefalia: ocurre cuando la parte alta del cráneo y el cerebro no se forman apropiadamente. Los bebés con anencefalia pueden morir durante el embarazo, nacer muertos o morir poco después de nacer.
  • Encefalocele: se presenta cuando parte del cráneo no se forma apropiadamente, y parte del cerebro está fuera del cráneo. Los bebés con este tipo de defecto del tubo neural usualmente mueren y quienes sobreviven pueden tener incapacidades físicas o mentales.

Los defectos en el tubo neural ocurren en las primeras semanas después de la concepción. Esto es cerca al tiempo en que a una mujer le falta el período. De manera que, los defectos del tubo neural pueden ocurrir en un feto antes que la madre se dé cuenta que está embarazada.

Hasta antes de la aprobación de la norma los fabricantes podían utilizar el ácido fólico como ingrediente opcional en los niveles especificados en los cereales para desayuno o preparados para lactantes y alimentos médicos.

Susan Mayne, Ph.D. y directora del Centro para la Seguridad de los Alimentos y la Nutrición Aplicada (CFSAN), parte de la FDA, señala que el agregado del ácido fólico en la harina de maíz ha sido de gran ayuda en la reducción de la incidencia de defectos del tubo neural en la población en general. Por ello, se tiene la certeza que agregar ácido fólico a la harina de maíz ayudará a aumentar el consumo de este ácido en las mujeres que incluyen esta harina en su dieta. En el mismo sentido se pronunció Jennifer Howse, presidenta de March of Dimes, una de las organizaciones que hizo el pedido por el ácido fólico a la FDA, y dijo que la aprobación de la medida constituye “una victoria para la salud materna e infantil”.

La adición de ácido fólico a la harina de maíz podría aumentar el consumo de ácido fólico en los que consumen regularmente productos a base de harina de maíz, incluyendo muchas mujeres latinas y esto reducirá el riesgo de nacimientos con defectos del tubo neural en este grupo.

No obstante, vale la pena precisar que la aprobación del FDA tiene que ver con el hecho que la adición de ácido fólico en el porcentaje aprobado es seguro para la población, y no en la reducción del riesgo de defectos del tubo neural.

A mirar las etiquetas en los EE.UU. y ojalá pronto en nuestros países también.