Las causas justas de Ben & Jerry’s

En un mundo donde los empresarios que van presos o que son procesados por la justicia normalmente los son por corruptos o porque han defraudado al fisco, tratando de obtener más beneficios, resulta refrescante saber que hay empresarios que son íconos en el mundo que están dispuestos a ir presos por defender causas justas.

Se trata de empresarios que hacen política desde el lugar donde están y haciendo lo que saben hacer. Ese es el caso de Ben Cohen y Jerry Greenfield, quienes fundaron Ben & Jerry’s, una empresa fabricante y distribuidora de helados en 1978.

Si bien ahora la empresa le pertenece a Unilever, los valores progresistas de los fundadores han sido seguidos por los nuevos propietarios y eso explica que hayan desarrollados sabores de helados con mensajes para defender el medio ambiente “Save Our Swirled”, defender el matrimonio igualitario “I Dough, I Dough” y promover a Bernie Sanders "Bernie’s Yearning".

Ahora, Ben Cohen y Jerry Greenfield, lejos de irse a descansar con los beneficios de la venta de su empresa, siguen haciendo de las suyas, y tal como señala un encantador artículo de Quartz, “The founders of Ben & Jerry’s got arrested in Washington and their namesake company couldn’t be prouder”, acaban de ser arrestados por protestar frente al capitolio pidiendo que se vote la petición del presidente Obama de elegir al nuevo miembro de la Corte Suprema.

Como sugiere el artículo, los consumidores tienen que sentirse orgullosos de Ben & Jerry’s, porque Cohen y Greenfield siguen inspirando estas acciones que lejos de avergonzar a la marca frente a consumidores y accionistas le añade valor porque la hace protagonistas de causas que interesan a los ciudadanos comunes.

Contrariamente a lo que ocurriría con otra marca que vería sus acciones bajar, o tendría que emitir un comunicado tratando de explicar lo acontecido señalando que hay un malentendido, en este caso los consumidores de Ben & Jerry’s no necesitan nada de eso, saben que Cohen y Greenfield han sido apresados por promover una causa que consideran justa y ellos seguirán consumiendo esos helados porque son hechos por la marca que crearon estos empresarios.

Ojalá en países como los nuestros tuviéramos marcas que se pueden dar ese lujo, marcas de gente progresista que no se calla ante las injusticias y se compra los problemas, marcas que saben alzar su voz para apoyar políticas que son buenas para los ciudadanos.