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Acuerdo de paz “definitivo”

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El nuevo acuerdo tomaría en cuenta más del 80% de planteamientos de la oposición.
16 de noviembre de 2016
Red star
Por qué es importante
Las discusiones con los actores políticos servirán para tratar sobre la implementación, sobre la pertinencia o no de una refrendación del acuerdo.

Colombia y las FARC anunciaron hace poco un nuevo acuerdo de paz, y aunque el presidente Juan Manuel Santos señaló que este iba a ser debatido con los partidos defensores y con la oposición, el jefe de la delegación del gobierno colombiano, Humberto Calle, ha sido enfático en advertir que este nuevo acuerdo es el definitivo.

Calle compareció en conferencia de prensa en la sede de gobierno conjuntamente con el ministro de Interior, Juan Fernando Cristo, el Alto Comisionado para la Paz, Sergio Jaramillo, el negociador Frank Pearl y el senador Roy Barreras, y  dijo textualmente "este es el acuerdo final, definitivo... no hay espacio para una nueva negociación", según reportó Associated Press, en su artículo Declaran como “definitivo” el acuerdo de paz en Colombia, sobre el cual se basa esta nota.

También señaló que el nuevo acuerdo recoge más del 80% de las propuestas de los partidarios del NO, sugiriendo que esto debería satisfacer sus expectativas.

Esto significa que las discusiones con los actores políticos servirán sobre todo para tratar sobre la implementación, sobre la pertinencia o no de una refrendación y qué formato tendría esta: plebiscito, cabildos populares o votación en el Congreso.

La idea es que la decisión sobre el mecanismo de validez involucre a la mayor parte de actores, con el fin de generar confianza sobre los avances logrados.

El proceso de validación es clave porque una vez que este se consolide, recién empezará el proceso de desarme de los guerrilleros de las FARC y su legalización para la participación política, lo cual es un aspecto que se mantiene respecto a la primera versión.

Si bien el acuerdo no contempla penas de cárcel para los guerrilleros, lo que trae este nuevo acuerdo son lugares donde los rebeldes pagarán sus condenas como castigos alternativos.

Lo que falta es saber si las omisiones que se contemplan y que fueron objeto de cuestionamientos en el marco del plebiscito de octubre, son dejadas de lado por la población y sus representantes políticos.

De eso dependerá efectivamente, si el acuerdo es realmente definitivo como ha señalado el delegado del gobierno. En este sentido, será fundamental la postur que tome la oposición liderada por el ex presidente Uribe para poder dar las concesiones que hacen falta para lograr efectivamente la paz en Colombia.