China aspira a ser una potencia aeroespacial

El entusiasmo de empresarios privados como Elon Musk y sus planes para conquistar Marte en el 2025, parecen haber inspirado a China a lanzar una propueta de su programa aeroespacial e invitar a inversionistas privados, incluyendo extranjeros a participar en él.

En este sentido, el propósito parece ser sumar esfuerzos con otros programas y otros presupuestos para cumplir la meta de conquistar el espacio.

Precisamente, un reciente artículo de Financial Times, titulado China Plans to send probes to Jupiter and far side of moon, da cuenta de los planes de ese país para conquistar el espacio no se quedan atrás respecto a lo que tienen otras potencias mundiales.

Para ello, quiere contar con el apoyo de inversores privados, incluso extranjeros que se interesen en su programa espacial que tiene un horizonte al 2030 y que comprende tres partes, una de las cuales incluye llegar a Júpiter con una sonda espacial, según confirma Bloomberg en su artículo titulado, China Invites Investors, Including Foreigners, Into Space Effort..

Precisamente, para dar a conocer este programa, el vice director del China National Space Administration, Wu Yanhua, presentó un documento (Aerospace White Paper) que recoge lo que podría considerarse la doctrina  que seguirá ese país para conquistar el espacio, las metas que se plantean en términos de exploración entre otros.

La más cercana sería llegar al lugar más alejado de la Luna en 2018, con el fin de complementar su visión de esta del 2013, cuando aterrizó en ella y logró enviar algunas imágenes de su superficie, según da cuenta el artículo de FT.

Pero quizá lo que más llama la atención es la inclusión de la intención de explorar el sistema de Jupiter.

Los expertos chinos en la materia, reconocen que están empezando algo más tarde que EEUU, Rusia y la Unión Europea, por lo que sus proyectos no tienen la envergadura de las potencias mundiales en la materia, pero que esperan poder ser la tercera potencia mundial en 2030.

Para poder lograrlo, se han dado cuenta que los recursos del gobierno son insuficientes para impulsar su programa aeroespacial y por eso quieren apalancar fondos con el sector privado, para lo cual han reducido las restricciones. Es más, el Libro Blanco no incluye ninguna referencia en términos de objetivos y tiempo para la inversión privada.

Toda una nueva estrategia para llegar a un espacio desconocido para la humanidad.