Pesca incidental: Redes de pescar que permiten escapar a los peces más pequeños
- Se calcula que cada año hay 27 millones de toneladas de pesca incidental en el mundo.
- En el Perú, la pesca incidental de juveniles en el caso de la anchoveta tiene una tolerancia máxima del 10% del total de la captura.
La pesca a través de grandes redes permite no sólo recolectar la mayor cantidad de peces, sino además captar otros que no son el objetivo de la captura y en muchos casos no están permitidos. Ya sea con redes de arrastre o redes de cerco siempre cabe la posibilidad de que ejemplares jóvenes u otras especies de peces, así como tortugas, lobos marinos y aves queden atrapadas y sean capturadas junto con las demás. Esto es lo que se conoce como pesca incidental. El problema es tal que se calcula que actualmente el 40% de la pesca en el mundo corresponde a ejemplares que no debieron ser pescados en un primer momento.
Para la FAO, el término "capturas incidentales" se aplica a la parte de la captura consistente en especies que no son objetivo de la pesca y que dependiendo del tamaño, la demanda del mercado, la estación y otros criterios, pueden no ser deseadas o tener valor limitado.
El diseñador británico Dan Watson, consciente de este problema, ideó un nuevo tipo de red conocida ahora como Safety Net. Esta red está compuesta por aros de luz LED que funcionan como agujeros de escape para los peces más pequeños. Una vez atrapado el cardumen de peces, sólo los peces más pequeños, guiados por las luces LED de los aros iluminados pueden llegar hasta ahí y escapar. En pruebas en California, las luces permitieron la reducción de captura de tortugas en un 60%. Cabe resaltar que las tortugas son una de las especies más afectadas por la pesca incidental.
En el Perú, la pesca incidental está reglamentada, por ejemplo, para el caso de la anchoveta. La extracción y procesamiento de ejemplares jóvenes con una medida menor a los 12 centímetros está prohibida, pero se permite una tolerancia máxima del 10% del total de la captura. En países europeos, donde las leyes de cuotas son más estrictas y no se permite el excedente, cerca de una tonelada de peces muertos son regresados al mar con el fin de evitar las altísimas multas. Este panorama, sin embargo, promete cambiar dadas las nuevas leyes que prohíben tajantemente el descarte de peces y que regirán a partir del próximo año. En ambos casos, el uso de redes como el Safety Net podría disminuir los excedentes y permitir que más ejemplares jóvenes continúen su ciclo de vida asegurando la población de la especie y permitiendo que esta perdure.