Manzanas que luchan contra la obesidad

La manzana es una fruta rica en fibra que ayuda a la disolución del colesterol por lo que es uno de los alimentos de interés en la lucha contra la diabetes. Además es un desintoxicante del hígado gracias a su contenido de cisteína. Por último, combate la anemia, la artritis y reduce la aparición de úlceras.

Un reciente estudio elaborado por la Universidad del Estado de Washington en Estados Unidos descubrió que las manzanas pueden jugar un papel muy importante en la lucha contra la obesidad y el sobrepeso. La investigación realizada en ratones, analizó la flora intestinal de dos grupos de roedores. Cada grupo poseía una composición microbial de su flora intestinal distinta. En el primer grupo donde una de ellas faltaba, los ratones comenzaron a subir de peso. Este peso extra iba acompañado de inflamación que causaba que los ratones comieran más originando una resistencia a la insulina, uno de los primeros signos de la diabetes. Otro dato interesante: cuando un microbio en especifico de los ratones con sobrepeso era trasladado a la flora intestinal de los ratones delgados, estos subían de peso. Al ingerir manzanas se aceleraba la producción de los micronbios "buenos" que permitieron que los ratones bajaran de peso.

Aunque el consumo de todas las manzanas generan la producción de microbios "buenos" que diminuyen los niveles de colesterol y por ende de obesidad, fue la del tipo Granny Smith la que permitió una mayor reducción en el peso de los ratones.