El lado oscuro de los focos ahorradores
- Los focos ahorradores contienen entre 5 y 20 mg de mercurio.
- Desde el 2012 los países de la Unión Europea no pueden usar focos incandescentes.
Los focos ahorradores fueron diseñados para ahorrar energía en beneficio del medio ambiente. Sin embargo, estas bombillas supuestamente "ecológicas" parecen no serlo. De acuerdo con un último informe de la OMS, estos productos para la iluminación están fabricados con gas de mercurio que es inodoro e incoloro y que cuando se rompen pueden constituir un peligro para la salud de las personas. Estos efectos pueden ser perjudiciales para el sistema nervioso, digestivo y respiratorio.
Es por ello que la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos – EPA recomienda una guía de limpieza y disposición cuando este tipo de focos se rompen: “En caso de que se rompa un foco ahorrador deben abrirse las ventanas, salir del cuarto y evitar el acceso por los menos 15 minutos. Luego deben recogerse los fragmentos con el uso de guantes de plástico”, informa.
La Unión Europea, desde el 2012 ha prohibido la elaboración y venta de los clásicos focos incandescentes dando paso, sólo al uso de focos ahorradores y luces LED. Sin embargo, esta última opción sería la más amigable no sólo con el medio ambiente sino con nuestra salud, a pesar de ser de más costo que las demás.
El siguiente video de Deutsche Welle explica los peligros de los focos ahorradores o bombillas de bajo consumo.