¿Por qué se prohibe la ayuda a indigentes?
- Carteles de “No alimente a los indigentes” pueden leerse en ciudades norteamericanas.
- La necesidad de dar una “buena imagen” a la ciudad ha llevado a tomar este tipo de medidas.
La ayuda humanitaria es promovida en todos los países del mundo. El dar abrigo, casa y comida a aquel que lo necesita es por lo general bien visto y un acto de ayuda al prójimo. Sin embargo, varias ciudades norteamericanas han comenzado a ver esta forma de generosidad como dañina para el desarrollo de sus lugares.
Desde el 2013, veintiun ciudades de Estados Unidos han tomado medidas para restringir la ayuda humanitaria (limosna) a personas indigentes. Esto significa que entregar de ropa y distribuir comida en espacios públicos está prohibido en estos lugares, lo que representa un incremento del 47% de ciudades con respecto al 2010.
Para el presidente de la Coalición de Personas sin Hogar de Estados Unidos, Michael Stoops, la razón responde a la carrera de las ciudades por acelerar el desarrollo económico y el impulso al turismo. En este ideario de ciudad, la entrega pública de alimentos o la organización de almuerzos y cenas al aire libre no está bien visto. Con la legislación que prohíbe estos actos, señala Stoops, lo que se busca es ocultar la indigencia.
Para el consultor de la ciudad de San Antonio en Estados Unidos, la entrega de alimentos a indigentes hace más daño que bien pues mantiene a los indigentes en ese estado. No les permite asistir a programas de ayuda y los estanca en su posición pues resulta más fácil recibir que buscar un trabajo y obtener ingresos por ellos mismos.
La legislación en las ciudades donde estos actos públicos se han prohibido apela a la restricción del uso del espacio público y la necesidad de un mayor control sanitario en la organización de almuerzos y cenas al aire libre.
