Consumidores buscan mayor transparencia en etiquetados

Un reciente estudio de Packaged Facts denominado Nutritional Labeling and Clean Labels in the U.S.: Future of Food Retailing ha encontrado que el 56% de los estadounidenses busca y lee de forma activa la información nutricional de los alimentos y las bebidas envasadas, mientras que un 8% para alimentos y 7% para bebidas, lee dicha información algunas veces.

Otro aspecto que destaca el informe es que dos de cada tres consumidores prefieren alimentos con ingredientes simples y otra proporción similar (67%) toma en cuenta la información sobre los beneficios para la salud de los alimentos a la hora de tomar sus decisiones de compra.

Si bien esta mayor conciencia puede estar influenciada por los esfuerzos del gobierno federal de exigir información nutricional en los paneles nutricionales y etiquetas de ingredientes de los alimentos envasados y bebidas, lo más interesante que está sucediendo es que hay empresas que están usando estos llamados para añadir valor a sus marcas haciendo más de lo que el gobierno pide. Por ejemplo Kraft Foods Group anunció la eliminación de colorantes artificiales y conservantes de sus macarrones con queso a partir de 2016, The Hershey Co reformulará las etiquetas de sus productos para que los ingredientes sean visibles, Nestle eliminará colores y sabores artificiales de todos sus productos antes de fines de 2015, y Tyson Foods, el proveedor de pollos de McDonalds, eliminará el uso de antibióticos.

Ojalá el pedido de mayor transparencia en las etiquetas fuese entendido así por todas las empresas y, todas ellas, encontraran en esta exigencia una oportunidad para diferenciarse de la competencia y para fidelizar a sus consumidores.

Packaged Facts advierte que el hecho de que los consumidores se preocupen más por lo que comen y beben es una tendencia que ha llegado para quedarse, por lo que la industria ya está dando los pasos hacia adelante para reconvertir sus productos convencionales. Las principales acciones que se están tomando están asociadas con la eliminación de colorantes y saborizantes, la sustitución de conservantes artificiales por otros naturales, la reducción de azúcares añadidos, el cambio a ingredientes libres de Organismos Genéticamente Modificados, y reducir o eliminar los antibióticos de la alimentación de los animales.

En el Perú esta tendencia tiene una variedad de ángulos desde los cuales debe ser analizada: desde el punto de vista del regulador, de las empresas que pueden adelantarse a lo que el propio regulador exija; y, de las empresas que producen y exportan colorantes naturales para el mercado estadounidense donde algunas empresas están optando por hacer suya esta preocupación de los consumidores por los ingredientes de lo que comen y beben.