NÚMEROS
Dime cuánto ganas y te diré quién eres
Esta frase no parece ser cierta para los hombres y mujeres más poderosos del mundo, y, lo más interesante es que ellos están dispuestos a hacérnoslo saber.
Hace poco el primer ministro Benjamin Netanyahu publicó en Twitter una copia de su cheque de pago de Febrero de 2016, según él como un acto de transparencia.
La primera conclusión a la que se puede llevar luego de ver sus ingresos, los descuentos que le hacen y lo que le queda es que, sin duda, no trabaja por la plata, aun cuando lo poco que gana para el cargo que ocupa es cinco veces el salario promedio israelí, según el equivalente al Instituto Nacional de Estadística de ese país.
Su boleta de pago decía 48,815 shekels que al tipo de cambio es USD 12526, y que luego de los impuestos, el seguro nacional de salud y otros, le quedan USD 4529.35, bastante menos de lo que pudiera imaginarse debe ganar el líder del estado judío.
Inmediatamente todas las redacciones de medios en el mundo se pusieron a indagar cuánto ganan los pares de Netanyahu, porque sin duda, genera curiosidad cuánto vale complicarse la vida con horas excesivas de trabajo y miles de problemas. Algunos podrán decir que el cargo incluye otros beneficios como casa, personal de servicio, seguridad, y un avión privado, pero eso solo mientras esté en el cargo y nada de eso se vuelve líquido.
Pero, Netanyahu no es el que gana menos, el presidente de China, Xi Jinping que lidera la nación más poblada del mundo, gana menos de USD 22,000 al año, según señalaba la CNN el año pasado, Barack Obama está en los USD 400,000, Ángela Merkel recibe USD 234,400, el primer ministro Gran Bretaña, David Cameron, USD 214,800 y, finalmente, Vladimir Putín, USD 136,000 al año.
En el caso de estos líderes mundiales, sus ingresos no reflejan el poder que ostentan en el mundo y menos aún sus responsabilidades en la toma de decisiones que afectan no solo a sus países sino al mundo entero, en la medida que tienen que ver con la paz, la seguridad alimentaria, las epidemias, las políticas nucleares, el cambio climático, entre otros.
Este tema tiene que ser analizado de cara a la aspiración que tienen países como los nuestros de reducir los niveles de corrupción en los que están involucrados varios expresidentes de países en la región.
Publicar un comentario