La tienda que no admite envases

Las bolsas y contenedores de plástico se han vuelto parte de nuestro día a día. Los usamos para todo y nos ayudan a transportar todo lo que compramos de forma más sencilla. Los tuppers de plástico nos ayudan a almacenar cosas, las botellas de plástico contienen líquidos de todo tipo para satisfacer nuestra sed, y así miles de ejemplos más.

El lado negativo es que estos envases contaminan nuestro planeta, están afectando los océanos y, aunque recibimos información sobre el impacto que están causando, pasado un tiempo, terminamos nuevamente usándolos.

El problema principal con los objetos de plástico es que demoran cientos y hasta miles de años (dependiendo del tamaño y grosor del objeto en cuestión) en desaparecer. Esto es en tierra firme, en el océano daña mucho más el ecosistema.

Si bien en los últimos años hemos podido ver propuestas para reducir o eliminar este problema, como por ejemplo proveer bolsas biodegradables o iniciar campañas de reciclaje. Lo cierto es que sólo el 14% de estas bolsas y contenedores llegan a ser reciclados, o eso dice el artículo de Fast Coexist, “This New Brooklyn Grocery Is Designed For Zero Waste”.

Por ello, cualquier iniciativa que busque reducir los niveles de contaminación, genera interés, y precisamente Fast Coexist, destaca una propuesta nueva denominada The Fillery que es una tienda de comestibles concebida por Sarah Metz, que no solo no te da bolsas en la Caja donde pagas, sino que no te ofrece ningún tipo de envase que contenga lo que compras y funciona de la siguiente manera:

• Todas las personas deben llevar su propio contenedor o envase para lo que quieran comprar, el mismo que deben pesar antes de colocar algo adentro, de esta forma se paga sólo por el contenido y no por el contenedor en sí. Todos los productos se venden al peso.
• Luego de esto, se elige qué se va a llevar. La tienda ofrece en su gran mayoría cosas no perecibles, como harina o flúor. Sin embargo, también vende huevos, frutas y verduras frescas.
• El local ofrece también talleres para aprender a hacer objetos que reemplacen el plástico de nuestro día a día, ayudando así al planeta.

El concepto de negocio ha lanzado una campaña en Kickstarter y hasta la fecha había recaudado USD 10.214 de los USD 15.000 pedidos. Si se desea, se puede apoyar la idea en su petición de Kickstarter. Esta es una forma directa de apoyar a algo que podría transformar nuestro planeta.