PERSONAS
Carros autónomos y sus dilemas morales
El concepto del bien mayor es uno que ha cuestionado al ser humano desde hace muchísimos años. Un experimento hecho hace algunos años preguntaba lo siguiente: Si tuvieras la oportunidad de salvar a cuatro personas dentro de un vehículo pero para hacerlo echar a una persona gorda, ¿lo harías? El experimento descubrió que solo el 30% de los encuestados contestaban que estarían dispuestos a hacerlo.
En otras palabras, entre la vida de uno y la de muchos, pocos elegimos salvar la de muchos si es que la elección de matar al otro está en nuestras manos. El problema se vuelve más complicado cuando cambias a esa persona gorda por tu hija, o tu esposa. ¿Contestarías nuevamente que la/lo matarías por el bien mayor? Este es un debate actual con respecto a los carros inteligentes, según lo señala un artículo en El País “¿Comprarías un coche que elegirá matarte para salvar otras vidas?”.
En este portal hemos hablado maravillas de los carros autónomos. En resumen, podrían solucionar muchos de los problemas que ocasionamos los humanos a diario, los cuales traen muertes consigo. Los carros autónomos serían capaces de racionalizar un problema, optando siempre por el bien mayor.
En tal caso, si un carro está llevando a tu hija al colegio y repentinamente aparecen tres niños jugando en la pista, el auto racionalizaría el problema. Si manejara un humano, este vería dos posibilidades: acelerar, matar a los tres niños y que tu hija viva, o estrellarte contra un muro cercano, que tu hija muera en el accidente pero salvar a los tres niños. El carro solo vería una solución: en una mano tenemos tres vidas y en la otra solo una. Optaría por estrellarse contra la pared sin cuestionar la decisión.
En teoría esto es bueno. Tres vidas fueron salvadas al costo de una. Sin embargo, es justo para los padres y la familia de la niña muerta. Estudios han demostrado que muchos padres están de acuerdo con que se pongan estos medios en los carros inteligentes, siempre y cuando no se ponga en el suyo. En otras palabras, no hay problema que el resto sufra mientras mi familia esté bien. Esto no está mal, nadie puede culpar a un padre de querer proteger a su familia.
Lo que nos lleva a la última parte de esta cuestión. Claramente los padres no están clasificados para elegir si esto debe proceder. Pero, ¿quién debería elegir? ¿Los gobernantes? ¿Los fabricantes? ¿Los consumidores? ¿Es una decisión que debe ser hecha?
¿Tú qué opinas?
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