IDEAS
Zimbabue: ¿nadie da puntada sin hilo?
La República Popular de China ha sido un importante aliado para el continente africano por muchos años. Para el continente africano, la relación ha permitido contar con inversiones y donaciones para impulsar mejoras en infraestructura y en otras áreas en el continente. Por su parte, China se ve beneficiada por un mayor y mejor acceso a recursos naturales, particularmente gas y aceite, y un mercado más amplio para sus exportaciones.
Es así que ha participado en la construcción de obras demandadas por necesidades de la población como hospitales, escuelas o edificios que permitan un mejor funcionamiento de las entidades gubernamentales. El apoyo más reciente ha sido de USD 46 millones orientados a la edificación de un nuevo parlamento en Zimbabue, según un artículo de Quartz, titulado “China is building Zimbabwe a new parliament”.
El gobierno del presidente Robert Mugabe atraviesa actualmente una dura crisis de aprobación por acusaciones de represión. En este sentido, la construcción de un nuevo parlamento que cuente con las comodidades y el espacio necesario para alojar a los 210 congresistas puede servir como un importante símbolo de confianza y compromiso con la democracia.
Sin embargo, contrariamente a lo esperado, la desaprobación hacia el gobierno en Zimbabue se ha extendido a la República Popular de China. Algunos opositores políticos acusan al gobierno chino de saqueador de recursos naturales y de apoyar regímenes políticos represivos, así mismo se ha hecho un llamado a que todos los chinos sean deportados.
Esta no es la primera vez que China interviene en el continente africano a través de la implementación de nueva infraestructura o la renovación de la existente. En 2011, China donó USD 25 millones para la construcción de torres gemelas en Kampala para uso público gubernamental. Así mismo, la república asiática construyó un parlamento en Sierra Leona, renovó el principal complejo gubernamental en Zambia y las instalaciones la Fuerza Aérea, edificó el Teatro Nacional de Ghana y muchos otros inmuebles a lo largo y ancho de África.
La relación entre China y Zimbabue también ha sido criticada en el pasado. China fue acusada de entregar al país africano jets de combate, vehículos y demás equipamiento militar. En general, las acciones de China en África han sido duramente criticadas por distintos gobiernos alrededor del mundo, con algunos señalando que se trataría de una especie de neo-colonialismo y porque además representa un sistema donde hay un desbalance de las relaciones de poder y los derechos humanos.
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