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La sobre oferta de restaurantes

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Los Millennials tienden a acudir con menor frecuencia a comer fuera y prefieren cocinar en casa, o como máximo pedir delivery.
24 de octubre de 2016
Red star
Por qué es importante
El sector gastronómico peruano tiene que estar atento a estas tendencia, seguir mejorando su productividad y no dejar de innovar.

En un país, donde la gastronomía es una de las cosas que hace sentir más orgullosos a los peruanos, es normal que cada mes se abra un nuevo restaurante, al menos en la capital. A pesar del aumento de la competencia, hasta ahora se vive un ambiente de armonía. No obstante, eso no ocurre en todo el mundo.

Un reciente artículo de The Wall Street Journal, titulado “Restaurant Chains Get Burned by Overexpansion, New Rivals”, advierte que en los EE.UU. como resultado del incremento de la oferta y de que la demanda no haya crecido al mismo ritmo, hay restaurantes que están cerrando de forma vertiginosa, sobre todo en los casos de cadenas pequeñas y nuevas. Mientras esto ocurre la cadenas grandes e internacionales no dejan de crecer.

El tema ha llamado la atención porque tres de esas pequeñas cadenas tuvieron que cerrar en una semana y las compañías detrás se declararon en bancarrota, lo que ha empezado a preocupar a la industria.

Los expertos han llegado a la conclusión que el problema es que la demanda no está creciendo y tratando de entender las razones que explican esta situación han llegado a la conclusión que los responsables son los clientes jóvenes.

Y es que antes, los principales clientes de los restaurantes eran los jóvenes. Sin embargo, la generación joven de hoy en día no tiene las mismas costumbres. Los Millennials disfrutan cocinar para compartir entre amigos, con el beneficio que es más económico. Además, como muchos de ellos trabajan desde casa, visitan menos restaurantes y lo máximo que hacen es pedir delivery.

Los expertos de la industria creen que es una especie de momento de cambio para el negocio de los restaurantes y lo que ahora se percibe solo en la frecuencia de visita, irá impactando más hacia futuro en otros aspectos a la industria.

Todo indica que antes que dormirse en los laureles y apelar al hecho cierto que los peruanos nos sentimos orgullosos de la gastronomía, cada vez hay que tomar más en serio la profesionalización de la gestión de los restaurantes para hacerlos más eficientes en la parte productiva y no dejar de innovar para lograr diferenciar su esencia. De lo contrario, empezará a ocurrir lo mismo que está sucediendo en los EE.UU.