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La inequidad amenaza el capitalismo

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El Brexit es resultado de la ansiedad de las personas mayores sobre la forma en que las economías han evolucionado.
02 de noviembre de 2016
Red star
Por qué es importante
Para Lew, los defendores del modelo capitalista no han logrado que la gente perciba los beneficios del mismo, sino todo lo contrario, mucho desequilibrio.

En el marco de una conferencia en la Universidad de Oxford, donde abogó a favor que Reino Unido mantenga su economía integrada a la Unión Europea, cuando se producza el Brexit, el secretario del Tesoro de los EE.UU. Jack Lew, dijo que la democracia liberal está en riesgo a menos que se haga algo para reducir la desigualdad.

En otras palabras, reducir la desigualdad, le conviene al capitalismo de libre mercado.

Precisamente, indicó que el Brexit es el resultado de la ansiedad de las personas mayores sobre la forma en la que las economías han evolucionado y la naturaleza desequilibrada de las ganancias, según señala un interesante artículo de The Guardian, titulado Liberal democracy is at risk unless inequality is tackled says Jack Lew, sobre el cual se inspira esta nota.

Para Lew el aumento del populismo es uno de los desafíos que tiene el mundo actualmente. Estuvo presente en la decisión sobre el Brexit, está presente en el proceso electoral de los EE.UU., al igual que en otros países europeos.

De alguna manera, sugiere que los defendores del modelo capitalista no han logrado que la gente perciba los beneficios del mismo, sino todo lo contrario, mucho desequilibrio.

Lew citó como ejemplo el caso de los impuestos y el afán de las empresas de buscar eludirlos en los paraísos fiscales, mientras las clases medias y bajas de los países están obligados a pagarlos. Por eso, hay reformas que no pueden seguirse postergando. Uno de esos ejemplos es el de la reforma fiscal en los EE.UU.

Para Lew es clave que la gente sienta los beneficios del capitalismo. Más aun cuando se enfrentan otros problemas como el de la inmigración que se percibe como la responsable de que la clase trabajadora no salga adelante. Cuando eso ocurre y no se confía en las autoridades, las personas tienden a tomar decisiones más emocionales que racionales.

En este sentido, advierte que los políticos tienen la responsabilidad de explicar a la población los beneficios de los acuerdos comerciales. De lo contrario, siempre habrá alguien que intente demostrarles que las barreras son mejores.

Es importante tomar en cuenta las reflexiones de alguien que ha acompañado en los últimos años al presidente Obama para asegurar la estabilidad financiera desde la crisis mundial.

Ojalá nuestros gobernantes entiendan que los reclamos para reducir la desigualdad no tienen que ver con colores políticos, sino más bien con asuntos prácticos.