El ají es uno de los ingredientes principales de la cocina mexicana, pero también es posible encontrarlo en platillos de otras partes del mundo. De una forma u otra, este ingrediente culinario se ha convertido en el favorito de millones de personas a lo largo y ancho del mundo por su peculiar sabor que parece despertar mil sensaciones en el paladar. Así mismo, la humanidad ha reconocido las propiedades curativas del ají por siglos.
Pero, de acuerdo a los hallazgos de un nuevo estudio, es posible que existan muchas otras razones para amar este fruto. Según informa Science Daily en su artículo “Eat hot peppers for a longer life?”, el consumo de ají podría estar vinculado con la reducción de mortalidad de una persona.
Investigadores del Larner College of Medicine de University of Vermont han conducido una extensa investigación acerca de los beneficios del ají y su vínculo con la mortalidad de las personas. Para ello, el equipo de científicos a cargo analizó la información recopilada en el National Health and Nutricional Examination Survey III, la cual cuenta con data de más de 16 mil americanos evaluados por 23 años. Esta información permitió advertir que, las personas que consumían ají que eran principalmente “hombres mexicano-americanos, jóvenes y blancos, casados, fumadores y bebedores, que se alimentaban con más vegetales y carne, tenían menores índices de colesterol” que aquellos que no consumían ají.
Si bien es cierto, el consumo de ají es restringido para pacientes de colon irritable, por ejemplo, podría ser altamente recomendable para el resto de personas, ya que, según concluyeron los investigadores, estaría relacionado hasta en un 13% con la reducción de la mortalidad. Lod índices son más fuertes en el caso de muertes causadas por enfermedades cardíacas o ataques al corazón.
Las razones por las que el ají podría alargar la vida de las personas aún permanecen inciertas para los científicos, pero existen algunas posibles explicaciones. En primer lugar, uno de los principales componentes del ají es la capsaicina, la cual se cree puede jugar un importante rol en los mecanismos moleculares y celulares que previenen la obesidad y regulan la circulación coronaria. Así mismo, este compuesto posee grandes propiedades antimicrobianas que “podrían afectar directamente al organismo de la persona, alterando la flora intestinal”.
La investigación aún se encuentra en una primera fase preliminar y es necesario que se realicen más pruebas que corroboren las conclusiones antes señaladas. Sin embargo, se trata de un importante descubrimiento para la salud, especialmente porque da a conocer propiedades realmente importantes de un fruto natural como el ají.
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