PERSONAS
La ATENCIÓN tiene que recuperar su libertad
Un reciente artículo de Graham Burnett, Alyssa Loh y Peter Schmidt, titulado "Powerful forces are fracking our attention. We can fight back", y publicado en el New York Times, alza la voz sobre un problema que pocos mencionan, pero que ya está pasando una alta factura en la educación: los estudiantes no están prestando atención.
De acuerdo a los autores, el problema está alcanzando dimensiones catastróficas y los docentes ya están reportando la disminución de los estudiantes de su capacidad de atención, lo cual está impidiendo estudiar, leer, disfrutar de arte, entre otros. La explicación está en el lado oscuro de la era digital que está fracturando sistemáticamente la esencia del ser humano por la cantidad de información que se apodera de nuestra atención al punto de que está dejando de ser nuestra.
Se compara las distintas formas de explotación del ser humano que caracterizaron la Revolución Industrial del Siglo XIX o las que se perpetúan a nivel laboral, con el momento en que se vive actualmente de expropiación de valores de tú, yo y nuestros hijos. Por ello, los autores plantean impulsar una cruzada de resistencia.
Esa cruzada consiste en recuperar la facultad de aprender, así como crear espacios donde se pueda prestar atención a objetos y lenguaje con otras personas. Esto es lo que hay que hacer en la escuela. No decir que los estudiantes que no prestan atención no pueden aprender, sino hacer de la atención, el objeto de la enseñanza.
En este sentido, citan una serie de esfuerzos de activismo para la “atención” que están realizando distintos expertos y centros como el Center for Humane Technology que investiga sobre la ética en la tecnología, hasta clubs o comunidades que promueven la lectura pausada para crear un mundo compartido más allá de los universos digitales personales.
Desde la perspectiva de los autores, nuestra capacidad de atender nació libre, pero cada vez pareciera más encadenada y no existe certeza de que los sistemas educativos estén preparados para trabajar en que recupere su libertad.
Publicar un comentario