La famosa cadena americana de donuts, Krispy Kreme, llegó Francia el 2023 y, según una nota de The New York Times, parece que su aterrizaje ha sido más que con buen pie. Decenas de personas hacían colas para adquirir este bollo frito bañado con distintos sabores.
La hipótesis detrás de este aparente y, no se sabe, si solo inicial éxito, es que los franceses aman a las cadenas americanas.
Lo anecdótico es que esto sería impensable hace una generación, dado que Francia es el país de los restaurantes con estrellas Michelin, de los baguettes, de los pain au chocolat y de los croissants.
La evolución de los hábitos de consumo de las nuevas generaciones que tienen menos tiempo para tomar sus alimentos y para prepararlos en casa ha impulsado la expansión de los Popeye’s fried chicken, los Burger King, KFC, Starbucks, Domino’s Pizza, Chipotle y otros más.
MdDonald’s fue el primero en llegar y hoy cuenta con 1500 restaurantes en Francia, solo después de EEUU en número de restaurantes. Esto ha convertido a ese país en una suerte de El Dorado para las marcas americanas.
No obstante, el éxito no es casual, Krispy Kreme, la cadena recién llegada ha realizado estudios para identificar los sabores más adecuados para los franceses y ha recreado sus productos, así como controlado su dulzor, para que sean más atractivos para los franceses. La lista de versiones de sus donuts se han tropicalizado para adaptarse al mercado francés, lo que hoy les permite vender alrededor de 45 mil donuts por día.
Adicionalmente, a los nuevos hábitos de las generaciones más jóvenes, otro aspecto que ha catalizado el impulso de las marcas americanas es la expansión de los servicios de delivery que no existía hace una década.
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