¿Por qué la morosidad en tarjetas de créditos es tan alta?
La Asociación de Banca y Seguros (Asbanc) ha informado hoy que el porcentaje de morosidad en tarjetas de crédito ha alcanzado su pico máximo con un 6,19% ¿A qué se debe este repunte de la morosidad desde el 2011?
A nivel mundial, el el 43% del volumen de las transacciones hechas con tarjetas (débito o crédito) se realiza con tarjetas de crédito. La tendencia mundial cada vez apunta hacia un menor uso relativo de la tarjeta de crédito frente a la de débito de parte de los consumidores. En el caso de nuestro país esta cifra asciende a 70%, esto quiere decir que los peruanos estamos haciendo lo inverso que la mayoría de consumidores del mundo porque preferimos la tarjeta de crédito que la de débito, es decir, el dinero prestado.
¿Por qué? Algunos expertos señalan a la falta de cultura en el buen uso de las tarjetas de crédito como el principal factor detrás de este fenómeno. En lugar de ver a las tarjetas de crédito como lo que son, es decir, como instrumentos que permiten adelantar el consumo de ciertos bienes con cargo a un ingreso que se recibirá en el futuro, muchos ven la línea de crédito como un aumento en su ingreso disponible mensual, por lo que hacen uso de este no solo para comprar electrodomésticos, muebles o una gran cena sino también productos y servicios de bajo valor como un menú de comida rápida en el patio de comidas de un supermercado.
Un uso responsable de la tarjeta de crédito significa sólo asumir responsabilidades de pago a futuro que tengan un respaldo de ingresos futuros asegurados y que no comprometan el presupuesto familiar fijo destinado a aspectos esenciales como la alimentación, el transporte y la salud.
Lamentablemente este análisis se omite y, frecuentemente, los consumidores terminan consumiendo más allá de sus posibilidades reales.De ahí que el porcentaje de morosidad en el Perú, que todavía es bajo comparado con países de la región como Chile (9,6%) y México (7,4%), no deje de subir a un ritmo cada vez mayor desde el 2011(año en el que el porcentaje de morosidad era de 3,86%). Para que deje de subir a tasas tan aceleradas, los peruanos debemos comenzar a vivir más de acuerdo con nuestras posibilidades y esto, en algunos casos, puede implicar ajustarse el cinturón.