China vs. India: La carrera por ser la fábrica del mundo
- En China la industria contribuye al 44% del PBI mientras que en India el 26%.
- El éxito económico de la India depende en gran parte del desarrollo del estado de Gujarat.

China en varias ocasiones se ha autoproclamado la fábrica del mundo y puede que esté en lo cierto. La industria manufacturera china aporta el 44% del PBI total del país. China ha logrado ser lo que es hoy, gracias a las reformas económicas introducidas en China en 1978, en especial a la ciudad portera de Shenzhen.
Schenzhen es una pequeña ciudad ubicada cerca al mar en la provincia de Cantón. Su posición estratégica frente a Hong Kong le valió una mayor atención por parte del gobierno a finales de los ochenta, años en los que se introdujeron concesiones a los impuestos con el fin de atraer a inversionistas. La represión de los sueldos de los trabajadores, permitida por el gobierno autoritario chino, enriqueció a las empresas convirtiendo a Schenzhen en el hub del Asia Pacífico que es hoy y en el principal promotor del auge económico chino.
India, por otro lado, también se encuentra en la carrera de fortalecer su industria manufacturera. Más conocida por ser una fuente de servicios (la cual aporta un 57% del PBI nacional), en la India la industria manufacturera rinde el 26% del PBI nacional. Si China tiene en Cantón su estrella más preciada, la India tiene en Gujarat la promesa de sobrepasar a China en el sector industrial.
Gujarat es un estado de la India ubicado frente al mar árabe. Conocida como la “joya del oeste”, su gran historia de emprendedores que data desde los sesenta y su ubicación estratégica le han conferido el título de la ciudad más industrializada de la India. Gujarat mantiene una variedad de industrias entre las que destaca el sector eléctrico, la manufactura de textiles, aceites, químicos y cemento. Lo atractivo de Gujarat es que ha logrado convertirse en una gran ciudad industrial en el marco del sistema democrático de la India, sin necesidad de las represiones propias del gobierno chino. Con el ingreso del primer ministro indio Narendra Modi, el gobierno no sólo siguió con el plan económico sino que se ha invertido en infraestructura con la construcción de nuevos caminos, puertos y aeropuertos.
Hace unos días Gujarat ha firmado una serie de convenios con el gobierno chino que permitirán la instalación de empresas chinas en la ciudad, así como la cooperación y el intercambio de información entre ambas partes en temas de comercio, industria, educación, ciencia, salud y medio ambiente. La carrera por ser la fábrica del mundo continúa.