PERSONAS
El trabajo infantil y la tecnología
Paul empezó trabajar a los 12 años en los túneles de las minas de cobalto en la República Democrática del Congo donde se pasaba a veces 24 horas al día sin salir, teniendo que hacer sus necesidades en el mismo lugar donde trabajaba. Mientras, otros niños como el trabajaban en la intemperie, a altas temperaturas o bajo la lluvia.
De acuerdo a UNICEF, en el 2014, unos 40 mil niños y niñas desde los 7 años trabajaron en minas en ese país, la mayoría de ellas de cobalto, insumo que sirve para producir baterías y que es un elemento sumamente dañino para la salud con consecuencias fatales.
La ONG Amnistía Internacional ha denunciado en un informe elaborado en colaboración de Afterwatch, luego de una investigación que les ha tomado meses, que aproximadamente el 50% del cobalto del mundo sale de la República Democrática del Congo y que las empresas tecnológicas más grandes del mundo como Apple, Samsung y Sony son indiferentes a la presencia de trabajo infantil en su cadena de suministros y no están siendo responsables para evitar que eso ocurra.
Como parte de su investigación, hablaron con 87 mineros y ex mineros de cobalto, de los cuales 17 eran niños. En ambos casos advirtieron que tanto niños como adultos realizan el trabajo sin ningún tipo de protección y atentando contra los derechos de los niños.
Una vez extraído el cobalto se lleva a la Congo Dongfang Mining (CDM), la filial del gigante chino del comercio de minerales Zhejiang Huayou Cobalt Ltd que lo suministra. Solo para que se tenga una idea de la magnitud del negocio, en 2013 esta empresa comercializó cobalto por valor de USD 90 millones. Luego sigue la ruta hacia los fabricantes de baterías que son proveedores de las grandes empresas como Apple, Microsoft, Samsung, Sony o Volkswagen, entre otros.
Se conoce que las empresas cuestionadas tienen compromisos éticos y de negocios que condenan activamente el trabajo infantil y rechazan cualquier forma de explotación del hombre. Sin embargo, todo indica que tienen que tener un rol mucho más proactivo para investigar su cadena de suministro para denunciar y promover que se sancione cualquier forma de trabajo bajo condiciones indignas.
Para empezar sería bueno que proporcionen información de su red de proveedores de cobalto, y hagan un mínimo de comprobaciones sobre dónde y cómo se extraen los insumos que se usan en sus piezas.
Publicar un comentario