El poder de la amistad

Un interesante artículo de The Atlantic, denominado “The Power of Friendship in Education”, da cuenta de lo que está detrás del éxito de jóvenes latinos que logran estudiar y salir adelante en las universidades estadounidenses de clase mundial.

Los casos de éxito que analizan, corresponden a los estudiantes de primera generación de familias que viven en la frontera mexicana, en zonas rurales, donde todas las estadísticas juegan en su contra porque proceden de familias que no hablan inglés, de bajos ingresos, y de zonas rurales. Un estudio de Pew Research señala que solo el 51% de estudiantes de secundaria de bajos ingresos se gradúa, aunque el gobierno de los EE.UU. se pone un rango entre 24 y 68%, dependiendo de la institución, y del tiempo que se tomen en terminar sus programas.

Por eso, The Atlantic quiso averiguar que había detrás de las historias de los chicos que lo logran e incluso llegan a las universidades, porque la mayoría se inclinan por títulos de dos años o certificaciones por competencias. Entre los que lograron ir a la universidad, el grupo es variopinto y también hay mujeres.

Todos ellos coinciden que cuando entraron en la universidad tuvieron un choque cultural, porque solo el 20% eran latinos, y también reconocen que la clave del éxito para sobrevivir en ese contexto fueron: los amigos, lo que ellos llaman ¨la raza¨, ¨la gente¨, ¨la pandilla en un sentido distinto al delincuencial¨.

Para ello, ese grupo humano que crean es el que los sostiene apoyando de diversas maneras, desde comida, hospedaje, lavandería, trabajando para apoyar a los nuevos, compartiendo viajes a casa, en casos de enfermedad, cuando se deprimen, entre otros. Lo más importante que les da ese grupo, es la certeza de que no están solos en la lucha por ser los primeros en sus familias que tendrán un título profesional.

Se trata de su red principal y cada estudiante latino que logra entrar a una de esas universidades de clase mundial, tiene el desafío de crear su propia red.

Esto es muy importante y significativo para saber cómo apoyar a estos estudiantes. Se tiene que facilitar su encuentro con sus pares porque eso los motiva mucho. No obstante, también hay opiniones respecto a que en algunos casos, puede segregarlos más y es un error rodearse solo de esos pares y no apostar por una verdadera integración.

Sin embargo, esto último no tiene en cuenta que estos chicos vienen de hogares y realidades sin sentido de pertenencia y sentirse que pertenecen a un grupo y que tienen una identidad es fundamental. Ese grupo es su ¨raza¨, en un sentido más amplio que el propio término.