NÚMEROS
¿Competitividad en Haití?
Haití es el país más pobre de Latinoamérica y uno de los más pobre del mundo. Las consecuencias que esto tiene en su población abarcan diversos aspectos, como hambre, crimen, enfermedad, analfabetismo, entre otros. Con un Producto Bruto Interno (PBI) per cápita de apenas USD 820 al año, la mitad de la población vive con USD 1 al día y que aproximadamente el 80% vive con menos de USD 2 diarios, tal como lo refiere un reciente estudio del World Bank Haiti. Let’s talk competition. A brief review of market conditions.
Su economía se basa en el sector de servicios, el cual representa el 56% de su PBI y comprende banca, electricidad y telecomunicaciones. Por otro lado, la agricultura representa el 24.1% y el sector industrial, un 20%, de acuerdo a cifras del World Factbook de la CIA. Particularmente, la agricultura haitiana se encuentra estancada. La producción de arroz, maíz y pollo no se ha incrementado en proporción al crecimiento poblacional desde los años 50, obligando a la importación de estos productos en gran escala para poder abastecer a la población.
El estudio señala que el principal problema que merma el crecimiento económico del país y, por ende, la mejora en la calidad de vida de sus pobladores, es la poca competitividad del mercado.
Las empresas temen invertir en Haití puesto que los riesgos de que un negocio fracase son altos, especialmente si se les compara con las condiciones que brindan otros países de la región. Haití se encuentra en el puesto 137 de 148 países según el Global Competitiveness Report del 2015-2016.
Esto se debe a que existe un fuerte control en cuanto a los precios y otros factores que permiten la competitividad y atraen la inversión. Así mismo, se percibe una fuerte discriminación y poco acceso al mercado para empresarios extranjeros.
Estos factores hacen del mercado haitiano sea poco atractivo, especialmente para los inversionista extranjeros, lo cual impide un mayor bienestar económico para país, es decir, para su población.
Esto ha generado que muchos jóvenes migren hacia países vecinos y se expongan a pasar situaciones más duras donde su trabajo no es remunerado al igual que los demás y tengan que pasar por muchas situaciones de discriminación.
Una tarea tremenda que Haití debe afrontar porque de lo contrario, seguirá siendo el país más pobre de Latinoamérica.
Publicar un comentario