La mujer frente a la transformación digital

El Banco Interamericano de Desarrollo viene realizando una serie de publicaciones como parte de una serie denominada “El futuro del trabajo en América Latina y el Caribe” (BID, 2019) que busca obtener datos que permitan analizar cómo se puede aprovechar las oportunidades y minimizar los riesgos en el ámbito laboral en el futuro. 

En los últimos años se ha hablado mucho sobre el tema de la transformación digital y como esta está cambiando la economía y el mercado laboral de los países. Esta transformación no solo implica que las organizaciones implementen los últimos avances tecnológicos, sino también, es necesario que cuenten con el recurso humano capaz de impulsar este cambio.

Pero la pregunta es ¿será esta transformación digital una oportunidad para la igualdad de género en el mercado laboral? Es precisamente está pregunta la que se formula en la última publicación de la serie publicada por el BID, la cual está relacionada con el mercado laboral para las mujeres en el futuro. 

Para que las personas puedan ser parte de esta transformación es necesario que adquieran las habilidades y competencias tecnológicas adecuadas, sin embargo, en el caso de las mujeres, según indica el estudio, estas eligen menos aquellas carreras relacionadas con ciencia, tecnología, ingeniería y matemática (CTIM), lo que las coloca en desventaja frente a los hombres y más aún frente a la transformación digital. 

La incorporación de tecnologías en el mundo está redefiniendo cuales son aquellas habilidades que serán requeridas y mejor remuneradas en el siglo XXI, estando estas directamente relacionadas con la CTIM, no obstante, actualmente solo el 30% de los graduados en carreras CTIM son mujeres lo que solo hace más grande la brecha en el mercado laboral entre hombres y mujeres. 

La participación laboral de la mujer en América latina y El Caribe ha llegado, según el informe, al 58% frente a un 82% de la de los hombres. En el caso peruano, la tasa de participación femenina es de aproximadamente 70%. Frente a esta situación y bajo un contexto de transformación digital es necesario que las mujeres empiecen por influir en la creación y el uso de tecnologías y cultivar las habilidades esenciales del siglo XXI.