NÚMEROS
Epidemia de heroína
En 1898 el laboratorio farmacéutico Bayer fue el primero en comercializar la heroína como un sedante para la tos y para sustituir el uso de la morfina. Se creía que este nuevo medicamento generaba menos adicción y desviaciones mínimas en el comportamiento e inteligencia de aquellos que la consumiera. Sin embargo, años más tarde se encontró que las personas que usaban la heroína por periodos extensos empezaban a desarrollar dependencia hacia ella. En 1913, Bayer suspendió la fabricación de la droga y en 1924 se prohibió cualquier tipo de comercialización de heroína en territorio estadounidense.
A pesar de esto, actualmente existe una epidemia de consumo de heroína en Estados Unidos, de acuerdo a un reporte de las Naciones Unidas, como lo señala Reuters en su artículo “Heroin use at 20-year high in U.S. drug epidemic, UN says”.
El World Drug Report 2016 de las Naciones Unidas alerta de una epidemia de consumo de heroína que en 2014 alcanzó el millón de consumidores solo en Estados Unidos y cuya tasa de muertes se ha quintuplicado desde el año 2000. Esta epidemia es la más fuerte de los últimos 20 años, según Angela Me, jefa de la investigación, y aún continúa expandiéndose.
Se especula que esta proliferación de consumidores se deba a una reciente legislación del gobierno americano que restringe el uso de prescripciones de opioides con efectos similares a la heroína. El propósito de esta ley es hacer más complicada la obtención de estas drogas pero ha generado un cambio de dirección que apunta a un incremento en el consumo de la heroína como reemplazo.
Otra posible explicación gira entorno a que, en los últimos años, el mercado de comercialización de esta droga, principalmente proveniente de Colombia y México, ha reducido sus precios de manera generosa, lo cual, por supuesto, genera una alza en la demanda de su producto.
Pero la heroína no es el único narcótico que causa un alto índice de muertes cada año en los Estados Unidos. Se han registrado incluso niveles mucho más altos en el caso de los opioides sintéticos, que cobran vidas 50 veces más que la heroína y 100 veces más que la morfina, de acuerdo al Center for Disease Control and Prevention.
El Estado americano trabaja para cuidar a aquellas personas que han decidido tratar su adicción, y este año el presidente Barack Obama pidió al Congreso que se destinara USD 1.1 billones para expandir el servicio a personas en rehabilitación por abuso de drogas como la heroína, que se ha convertido en el narcótico más mortal.
jabi - 30/06 20:54:59 | proexpansion
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