La identidad europea

La salida del Reino Unido, que para algunos resultó incomprensible, fue la señal de alerta de que había algo que estaba pasando con la Unión Europea.

Ahora, una decisión del bloque vuelve a hacer noticia porque se pretendería esconder tras esta, una segunda intención detrás, según da cuenta el artículo del Daily Mail, titulado “EU's £1bn bribe to make teens back Brussels: Free inter-railing! Every 18-year-old to get a ticket in desperate scheme to win support”.

Se trata del anunció de que se facilitará a todo ciudadano que cumpla 18 años y pertenezca a algún país miembro, un pasaje gratis para viajar por toda Europa por tren, el mismo que duraría aproximadamente un mes, lo cual permite imaginar que no se trata de un ticket muy barato.

Esto que en otro contexto podría ser una buena noticia, en este caso no lo es tanto porque para muchos, se trataría de una suerte de soborno para que los jóvenes dejen de irse de Europa a buscar futuro en otros lados.

Y es que según estadísticas de migración, los jóvenes europeos se están yendo del bloque porque no se sienten parte de Europa.

Por ello, los líderes del bloque, han optado por esta iniciativa que buscaría fortalecer la identidad europea, cuyo costo sería de al menos mil millones de euros.

Las críticas a la medida no se han hecho esperar. Algunos expertos, como Jill Seymour, afirman que los jóvenes preferirían que la UE resolviera el problema del desempleo masivo que se vive a lo largo de Europa, o que arreglen de una vez los problemas que se viven en Grecia, donde miles de personas sufren por llevarse comida a la boca, y es muy poco probable que les interese una opción de viajar por el continente si no tienen dinero para algo tan básico como la alimentación.

Además, para otros esta propuesta en el fondo valida la decisión de Reino Unido de separarse del bloque.

Más allá de que se trate de una oportunidad, o que esta esconda una suerte de soborno, lo cierto es que el continente europeo se encuentra en uno de los momentos más complicados de su existencia y su población se pregunta si es la mejor decisión gastarse miles de millones de euros regalando pasajes, en vez de buscar soluciones a problemas más reales y tangibles.