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Davos y la presencia femenina al alza
Cada año Davos (Suiza) congrega a los representantes más importantes del mundo en política, economía y cultura para discutir los aspectos de mayor relevancia que afectan a personas a lo largo y ancho del globo. Este evento es conocido como el Foro de Economía Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) y este año versará sobre el liderazgo responsable en distintos aspectos.
La presencia de personalidades de diversos orígenes y con variadas experiencias es vital en ocasiones como esta. Pero uno de los principales problemas que debe enfrentar el WEF es precisamente el de congregar a un número de mujeres equiparable al de hombres participantes. Para lograrlo se han implementado ciertas medidas que fomentan la integración de mujeres a las listas y, finalmente, los esfuerzos parecen estar dando frutos. El 2017 será el año con mayor participación de mujeres en la historia del WEF, de acuerdo a Quartz en su artículo titulado “Women finally represent more than a fifth of the delegates at Davos”.
El Foro de Economía Mundial ha logrado un importante progreso en cuanto a la igualdad entre hombre y mujeres participantes en su evento. En el año 2000, el porcentaje de mujeres asistentes era apenas de 9%, cifra que se duplicó el año pasado gracias a las iniciativas del propio foro, tal como se reportó a través de este medio en un artículo previo titulado “Las mujeres en Davos”.
En total son 120 las organizaciones que se encuentran afiliadas al WEF como “asociados estratégicos”, y cada uno recibe 4 pases para el foro. Una de las medidas implementadas para conseguir mayor participación femenina fue ofrecer un ticket extra si se incluye a una mujer entre los representantes asistentes.
Barri Rafferty, presidente de comunicaciones de Ketchum (agencia de marketing), señala que “a pesar de que las estadísticas demuestran que una mayor variedad en los equipos de liderazgo es buena para los negocios, la representación femenina en los altos mandos está creciendo a un ritmo alarmantemente lento”. Las iniciativas del WEF estimulan indirectamente a las organizaciones a romper esta barrera y a darle mayor cabida a las mujeres en puestos importantes. Sin embargo, aún queda mucho por hacer.
Este año, el total de mujeres asistentes equivale al 20% del total de participantes, apenas dos puntos por encima de la cifra registrada en 2016. Sin duda, la respuesta no se encuentra en qué más puede hacer el WEF, sino en qué está ocurriendo en las compañías que impide el acceso a más mujeres a cargos importantes. Es momento de que las organizaciones dejen de lado los prejuicios y empiecen a recompensar las capacidades de sus colaboradores sin importar si son hombres o mujeres.
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