IDEAS
Uber de bicicletas
Los servicios como Uber forman parte de un sistema llamado “economía compartida”, o colaboración colaborativa. Bajo este, los usuarios ponen en alquiler cosas que no están usando, como carros, casas (en el caso de Airbnb), entre otras. Sin embargo, no todo tipo de servicios pueden prestarse bajo este sistema.
Recientemente, algunas aplicaciones para smartphones en China han intentado incluir a las bicicletas en el espectro que este tipo de negocio ofrece. Pero, esto parece no estar funcionando del todo bien dentro de los parámetros de la economía compartida, afirma el artículo de Tech Node, titulado “Are China's bike-sharing platforms really part of the sharing economy?”, a partir del cual elaboramos esta nota.
El sistema se basa en la colaboración, como lo indica su nombre, es decir, que todas las partes involucradas se deben beneficiar de un modo u otro y ayudar a beneficiar al resto. Por ejemplo, en el caso de Uber, quienes solicitan el servicio se benefician del transporte, pero también se benefician los dueños de los autos, ya que consiguen dinero a partir del servicio de transporte que prestan. Además, la empresa premia a los conductores que reciben mejores opiniones de los clientes y de esta manera, estos se esfuerzan por mantener su carro limpio y ofrecer una mejor calidad de servicio, enriqueciendo el modelo. Además, Uber gana un porcentaje de lo que los conductores obtienen.
Si bien el sistema es más complejo, queda claro que todas las partes se benefician de algún modo. Sin embargo, no se puede decir lo mismo de aplicaciones chinas como Mobike u Ofo, las cuales ofrecen alquiler de bicicletas. Para comenzar, ambas están financiadas y respaldadas por gigantes chinos como Xiaomi y Foxconn. Debido a esto, es la empresa la que constantemente repara y brinda nuevas bicicletas para que los usuarios utilicen.
Esto es bueno para los clientes, quienes solo deben pagar por el uso del transporte. Sin embargo, la empresa pierde dinero cada vez que una bicicleta necesita ser reparada. Esto no sucede en el caso de Uber, donde son los conductores quienes reparan y mejoran sus propios autos. En otras palabras, al faltar la tercera parte en el sistema de alquiler de bicicletas por aplicación, el modelo pierde rentabilidad.
Por otra parte, bicicletas nuevas y baratas son un poco menos costosas que la propia subscripción a las aplicaciones, lo que podría hacer que los clientes se cuestionen cuál es el beneficio de alquilar una bicicleta cuando pueden comprar una nueva a un buen precio y tenerla a disposición permanente.
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