HISTORIAS
Naturaleza milagrosa
El cáncer de mama es el tipo más común de esta enfermedad en mujeres, y su tasa de mortalidad es bastante elevada. Sólo en el año 2011, 508 mil mujeres murieron a causa del cáncer de mama, según cifras de la Organización Mundial de la Salud. Los expertos advierten constantemente de la necesidad de realizar chequeos anuales para detectar esta enfermedad a tiempo y así poder salvar a la paciente. Dependiendo del estadio en que se encuentre, los tratamientos serán más o menos agresivos.
Sin embargo, cuando una mujer es diagnosticada con cancer de mama triple negativo, se sabe de inmediato que las complicaciones serán mucho mayores que en otros casos. Este tipo de cáncer representa entre el 15% y 20% de los tumores de pecho y se expande rápidamente hacia otros órganos. Los tratamientos para el cáncer de mama triple negativo son sumamente agresivos y pueden tener efectos colaterales en la salud del paciente.
En vista de esto, los expertos en salud buscan desarrollar nuevas curas que no debiliten más a los enfermos. Para alegría de muchos, un nuevo estudio ha descubierto que un componente natural que se encuentra en ciertos vegetales puede reducir el riesgo de metástasis en este tipo de cáncer, según informa GEN en su artículo “Natural Celery Molecule Inhibits Triple-Negative Breast Cancer Growth”, sobre el que se inspira esta nota.
El cáncer de mama triple negativo se caracteriza por la presencia de células que carecen de tres receptores, los cuales son atacados por los tratamientos de quimioterapia convencionales. Al no existir dichos receptores, las pacientes necesitan medicamentos mucho más agresivos y tóxicos que, a la larga, tienen severos efectos secundarios.
La luteolina es un compuesto natural que se encuentra en verduras como el apio, las zanahorias y cebollas y un grupo de científicos de University of Missouri tiene razones para creer que podría ser la cura que todos estaban esperando.
Los investigadores realizaron pruebas en ratones con tumores humanos de cáncer de mama triple negativo, a los cuales se les suministró luteolina. En la primera fase de pruebas, se encontró que esta sustancia inhibía el proceso de metástasis al pulmón en el organismo de los roedores. Asimismo, “en casi todos los casos los ratones mantuvieron su peso inicial, lo cual significa que la luteolina no tiene efectos tóxicos. Este compuesto natural es tanto seguro como efectivo”, señaló Salman Hyder, científico biomédico y participante del estudio.
Los hallazgos del equipo investigador deberán ser corroborados en próximos estudios antes de que se obtengan los permisos necesarios para fabricar medicamentos. Primero se requiere comprobar que el efecto de la luteolina será el mismo en humanos como en ratones. Una vez que se cuente con la autorización, los científicos podrán proceder a producir el tratamiento y luego hacer pruebas clínicas en humanos.
Si bien es cierto la investigación aún se encuentra en una fase preliminar, esta noticia trae esperanza tanto a pacientes como profesionales de la salud pues quizá en el futuro sea posible salvar más vidas sin recurrir a tratamientos agresivos.
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