¿Es posible la IA verde?

En una nota publicada en marzo último, se planteaba el impacto que puede tener la creación de parques de paneles solares en zonas agrícolas y en la vida alrededor de los mismos. Pero, ¿qué pasa con los data center?, esos almacenes de servidores que custodian la información de las empresas y que también requieren grandes cantidades de energía?

Según un artículo de The New York Times de Patrik Sisson, titulado A.I. complicates efforts to keep data center green, plantea que no solo hay que medir la huella de carbono de los centros de datos o data center (por sus siglas en inglés) sino la de sus fuentes de energía que deben apuntar a ser cada vez más renovables.

Esto pasa por evaluar lo que la nota de Sisson denomina la captura del campo que tiene que ver con el hecho que antes los centros de datos se construían cerca de donde están los consumidores, pero ahora se construyen en donde tienen las fuentes de energía porque la expansión de la inteligencia Artificial (A.I. en inglés) exige centros más grandes y con más potencia que tienden a tener más huella de carbono.

Solo para poner un ejemplo, antes se usaba 10 megavatios, pero hoy en día lo común es que usen 100 megavatios, aun cuando hay 10 en los Estados Unidos que estarían usando 621 megavatios.

Por ello, algunos expertos plantean que los centros de datos deben aspirar a ser más sostenibles e invertir ellos mismos en el uso de energía renovable que atienda sus necesidades. Y no han tardado en llegar las primeras respuestas. Amazon ha anunciado una inversión de USD 10 mil millones para un cran centro de datos en Mississippi que además tendrá su propio campo de energía solar.

Algunos Estados están empezando a invertir en plantas de generación de energía que incluso puede hacer menos costosas las inversiones en esos Estados, por lo que los hacedores de políticas públicas creen que debe medirse el impacto ambiental potencial del avance de la IA y ya hay algunos Senadores que plantean que quienes quieran instalar un centro de datos deberían  poder asegurar que el 90% de energía que usan proviene de energías renovables.

Hay que esperar para ver si se animan a impulsar una regulación en este sentido.