A Google no le interesa la verdad

Todos esperamos que el buscador que utilizamos para navegar Internet nos de la mejor información posible, al punto que con frecuencia le podemos llegar a creer sobre temas de salud más que a nuestro médico. Los buscadores nos hacen sentir más inteligentes pues nos podemos enterar de muchos temas con solo un clíc. Por eso cuando estamos por utilizarlos esperamos encontrar la verdad en ellos.

Para Google, sin embargo, estas expectativas no tienen por qué ser satisfechas por su buscador. Google, en palabras de Luciano Floridi, conocido como “el filósofo de Google”, nunca ha dicho ser el mejor proveedor de información. La precisión y el acierto no son tan importantes para Google como sí lo es la eficiencia. O, mejor dicho, lo que definen ellos por eficiencia.

Según Floridi, a Google le importa que encuentres lo más rápido posible aquellos resultados que el buscador considera que podrías estar buscando. Como se trata de un algoritmo, su funcionamiento puede mostrar como primeros resultados artículos que respondan una pregunta tuya de manera equivocada simplemente porque el título coincide más con tu búsqueda. Es decir,  el buscador es indiferente a la verdad. 

Esta característica sobre la cual Google no se averguenza, puede en el futuro afectar el liderazgo mundial de Google en el mercado de buscadores. La razón es muy simple: como bien reza el dicho “las expectativas son rencores en construcción”. Cuando los consumidores descubran que los resultados de sus búsquedas son una mezcla desordenada de información verdadera, con otra que parece verdadera que no lo es y con otra que definitivamente es falsa, entonces seguramente se replantearían el uso de buscador como paso inicial para cualquier búsqueda. 

Actualmente, 73% de los usuarios de los buscadores consideran que el uso de los buscadores genera resultados precisos y confiables. Peor aún, según un estudio publicado en el Journal of Computer-Mediated Communicacion, las personas confían más en los resultados que aparecen primero en las búsquedas, a pesar de que no exista ningún elemento concreto que lo justifique. 

Es decir, la forma en la que Google define los resultados de cada búsqueda que haces depende exclusivamente de lo que sus algoritmos consideran relevante para ti. Así que no te confíes, lee bien. Tampoco olvides que Google está creciendo como un pulpo y entrando a una gran cantidad de negocios para los cuales utiliza a su buscador como canal de comercialización. Precisamente, en Europa ya está siendo investigada por mostrar resultados de búsqueda poco relevantes para el usuario y muy conectados con sus negocios.