Esto separa a Perú del primer mundo

Como parte del Programa país que el Perú suscribió con la OECD, el organismo publicó el primer volumen de la Revisión Multidimensional del país que ayudará a determinar cuáles son los desafíos que tiene el país para ser parte del club de los países del primer mundo y cuán lejos estamos de poder lograrlo.

Esta primera parte es más un diagnóstico de cómo estamos luego de un análisis profundo de cuáles son los principales problemas para lograr el desarrollo inclusivo que espera el país, acompañado de algunas recomendaciones sobre las reformas estructurales pendientes para que este sea una realidad.

Para que todos los ciudadanos conozcan en un lenguaje sencillo cuál es el diagnóstico que la OECD ha hecho de nuestro país, vamos a realizar algunas notas que permitan conocer el documento poco a poco. Nada de lo que dice es materia desconocida para los peruanos, la diferencia es que la OECD lo plantea como parte de la tarea que hay que hacer para ser parte de ese club al que aspiramos a entrar cuando ya no seamos un país a dos mitades: con incluidos y con los que no lo están; o, por lo menos estemos caminando hacia eso.

Los principales cuellos de botella que identifica la OECD para que el Perú tenga un desarrollo inclusivo sostenible son ocho:

• Baja calidad de la educación, combinada con la desigualdad en el acceso a la educación y en el desempeño educativo a nivel de los distintos niveles socioeconómicos.
• Pobre nivel de capacidades que no están alineadas a las necesidades del mercado laboral.
• Rigidez y segmentación en el mercado laboral, lo cual general inequidad den las condiciones laborales.
• Pobre diversificación de la economía en sectores que pueden crear más y mejor empleo e impulsar la productividad y competitividad.
• Baja conectividad de la economía peruana que determina altos costos de transporte.
• Bajos niveles de investigación y de gasto en desarrollarla lo cual no permite mayores niveles de innovación.
• Limitada capacidad del Estado en los distintos niveles de gobierno que determina poca confianza y legitimidad.
• Débil institucionalidad en el sistema tributario lo cual afecta que se pierdan oportunidades para superar las brechas en educación, innovación e infraestructura.

Estos cuellos de botella se refuerzan con otras tres condiciones que caracterizan la economía del país y explican el impacto en la trampa de los ingresos medios:

• Alto nivel de informalidad que domina el mercado laboral y se refleja en las ineficiencias en la oferta y la demanda del mercado laboral que deberá ser reducida para impulsar el crecimiento inclusivo.
• Alto nivel de desigualdad que afecta la cohesión social y la desigualdad de oportunidades, dejando a mucha gente en la pobreza, la cual se refleja en diferentes niveles y dimensiones: ingresos, ubicación, género, grupos étnicos, entre otros.
• Bajo nivel de productividad que es la tarea pendiente del país para conducirse hacia un proceso de crecimiento que le permita competir en el mercado global e incrementar los niveles de ingreso para todos.