Negocios que tocan personas

En muchos países, y el nuestro no es la excepción, hay negocios que se convierten en parte de nuestra historia personal, porque forman parte de nuestros recuerdos, porque adquieren ciertos significados para nuestra vida y porque siempre contábamos con el hecho que estarían en el mismo lugar.

Por ello, que lo que les pase a estos, puede afectar, molestar y conmover a los ciudadanos.

Esto es lo que ha ocurrido con la tienda más grande de Toys R Us que después de 14 años cerró las puertas del local que tenía en Times Square de Nueva York, informa The New York Times. Los ciudadanos y los turistas que pasaban por allí, ya no podrán ver a la rueda de la fortuna, un Tyrannosaurus gruñendo o a la Barbie de tamaño natural.

Este cierre se suma al de FAO Schwarz, otro palacio del juego que tuvo que irse en julio del año por un problema del costo de los alquileres, que ha ocurrido también con Toys R Us que tenía casi 2000 metros cuadrados.

Las imágenes que deja la tienda casi vacía con niños sentados en lo que queda de las instalaciones son de nostalgia por todo el tiempo que ese local fue parte de la visita obligada de los niños que solo en sueños habían imaginado una tienda como esa, con sus amigos y juguetes preferidos en tamaño natural.

Antes del cierre, cientos de personas recorrieron el local tomando fotos o comprando los últimos saldos de juguetes disponibles con el fin de llevarse un recuerdo del local.

La compañía informó que está en la búsqueda de otro local en Manhattan porque este no pudo ser renovado debido a los altos costos de alquilar el espacio por lo que decidieron no renovar el contrato que se vence este mes. También están recolocando a los 350 empleados de la tienda que están cerrando.

Se sabe que ahora el inmueble será dividido por plantas para ser alquilado y que empresas de la industria de la moda ya han mostrado interés en tomar los espacios de la planta baja.

Una pena para quienes se dejan recuerdos e imágenes grabadas en sus corazones de un lugar donde parecía que todas las ilusiones se hacían realidad.