Marcos Galperín y el eBay argentino

Pierre Omidyar escribió cuando tenía 28 años el código original de lo que luego se convertiría en el sitio de subastas por Internet eBay, el cual fue lanzado en setiembre de 1995. En 1999, Marcos Galperín, junto con un colega, fundaron Mercado Libre, el sitio de comercio electrónico más visitado de América Latina. No siempre fueron líderes en el mercado. De hecho, llegaron a tener hasta 40 competidores en la región. Sin embargo, demostraron ser los mejores, principalmente porque gastaron menos dinero en marketing y más en perfeccionar su producto.

Actualmente, el sitio que cuenta entre sus financistas a JP Morgan, Goldman Sachs, GE Capital, Flatiron y el Banco Santander se encuentra en una posición de privilegio para atender el mercado latinoamericano. Incluso, eBay en 2001 se convirtió, además de competidor, en accionista, al adquirir 19.5% de la operación de la empresa en Brasil. 

En 2014, Mercado Libre permitió que se completaran transacciones entre 30 millones de compradores por un valor combinado de cerca de USD 8 mil millones. El modelo de generación de ingresos de la empresa es muy similar al de eBay: comisión por transacciones, anuncios en línea y un sistema de pagos propio (MercadoPago). Gracias a estos resultados y a que todavía la empresa solo sirve a cerca del 5% de la población en América Latina (en Estados Unidos, este indicador es 15%), las perspectivas de crecimiento son favorables: por ejemplo, se espera que el valor de mercaderías transados en los próximos 5 años se duplique, aun a pesar del bajo crecimiento económico que experimentará la región. En este contexto, la capitalización de la empresa (USD 6 mil millones) parece estar justificada. 

Galperín suele pensar en su negocio como un instrumento de democratización similar a Google o Facebook, que democratizaron el acceso a la información y la capacidad para organizarse y expresarse de las personas. Mercado Libre, dice Galperín, democratizó el comercio. Probablemente el impacto positivo más importante  sobre los consumidores es que gracias a Mercado Libre, no importa si viven lejos de las grandes ciudades, porque pueden obtener los mismos productos a un precio similar. Para los pequeños negocios que antes estaban forzados a vender a través de las grandes cadenas comerciales, Mercado Libre da la oportunidad de llegar directamente a los consumidores. 

La ola que se corrió en su momento Pierre Omidyar con eBay y que ahora está corriéndose Galperín con Mercado Libre es la de la migración de las transacciones comerciales del mundo físico al digital. La relevancia que ha adquirido Mercado Libre en la región y sus perspectivas de crecimiento no ha podido ser ignorada por los actores tradicionales del sector comercio. Varios de estos han tratado montar tiendas de venta online. Otros como Walmart ya están comenzando a asociarse con Mercado Libre y a poner tiendas virtuales dentro de su plataforma.