TENDENCIAS
Los outlets del futuro
Existen personas que pagan el precio de etiqueta de la ropa que les gusta, aquellas que esperan las rebajas y los que han descubierto lo que es comprar en outlets. Y es que después de hacer eso último, se hace difícil volver a pagar precios regulares por cosas que puedes conseguir a menor precio. Para aquellos que no lo sepan, los outlets son zonas comerciales donde se vende ropa de marcas renombradas a un menor precio. Normalmente con ofertas y descuentos de todo tipo porque se trata de restos de la temporada anterior, saldos de exportación o por alguna otra razón.
Algunas veces la diferencia no es mucha. Sin embargo, siempre se puede encontrar prendas realmente baratas si es que se busca bien.
La razón por la que los outlets no son demasiado populares es debido a la idea con la que se concibieron. Estos fueron creados para ser una especie de lugares de paso, nunca se pensaron para ser lugares donde la gente se queda comprando por horas. Esta es la principal diferencia que tienen con los centros comerciales.
En los centros comerciales, hay muchas tiendas que visitar, pero además, ofrecen otros servicios como salas de cine, patio de comidas, pequeños puestos de postres y bocadillos, librerías, centro de salud, entre otros. Esto permite que fácilmente una persona pueda llegar en la mañana y quedarse hasta el final del día, sin aburrirse en ningún momento.
En los outlets, eso no había ocurrido hasta ahora. Precisamente, eso es lo que dice el artículo “Outlets se diversifican en servicios y suman patios de comida y cines” de Diario Financiero de Chile.
Las Rozas Village en Madrid, España, es un ejemplo de lo que está ocurriendo con estas zonas comerciales que se han vuelto tan afamadas, incluso hay un bus que parte del centro de Madrid a la zona donde todo lo que se compra puede tener devolución de impuestos si uno es turista extranjero, y no solo te puedes quedar un día completo, sino que quieres regresar al día siguiente.
Claro que la clave son los precios. Ese bolso de marca que si lo quisieras comprar en tu país, no te alcanzaría el dinero, pero que lo encuentras a la tercera parte de precio. Esa chaqueta que la viste en el centro comercial y que costaba una suma impagable y que está al 50%. Ese vestido de diseñador que recién empieza y que te permitirá lucir única.
Ver todo eso cansa y abre el apetito, así que por supuesto que hay que hacer una pausa antes de continuar y para eso tienen cafés y restaurantes abarrotados de gente.
Sin duda, una experiencia diferente porque puedes comprar aquello que no podrías en un centro comercial convencional.
Publicar un comentario