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La escasez de agua ya es una realidad
“Nacimos en este planeta, pero no estamos destinados a morir en él” decía un personaje de la película Interestelar, dirigida por Christopher Nolan. En esta, la humanidad se encuentra en un estado donde la comida se está a punto de agotar, al igual que el agua. Por tanto, un grupo de científicos se marcha a encontrar cuál de otros tres planetas habitables podría mantener a la humanidad.
El problema es que eso que parece solo un guión de película cada vez es menos ajeno a la realidad.
Precisamente, de eso trata un artículo de IB Times, denominado,“Water scarcity could seriously hurt major economies: World Bank”, en el cual se afirma que hay regiones del mundo donde las fuentes de agua disminuirán dramáticamente en las siguientes décadas debido a factores como el cambio climático y un crecimiento de la demanda del agua. Las regiones mencionadas son el Medio Este, el Norte de África, el Centro de Asia. Estas son las que recibirían el golpe más duro de la escasez del agua.
Las proyecciones son de temer. Un proyecto monitoreó la forma en la que 235 ríos se movían y cambiaban. Se analizó la cantidad de humedad, la sequedad y los ciclos de cada río y se comparó con la demanda del agua de la región donde el cuerpo acuático se encontraba. Los resultados mostraron que para el 2030, la demanda de las regiones mencionadas se habría excedido en 40% de lo que los ríos podrían producir como recurso hídrico.
Las razones podrían parecer poco obvias al inicio. Sin embargo, resultan comprensibles una vez que se exponen. La población está creciendo muy rápido. Esto tiene muchas consecuencias en el mundo. En primer lugar, demanda un crecimiento de infraestructura acelerado, lo cual incluye: agua para beber, para asearse, entre otros Por otro lado, se necesita agua para producir los alimentos de esta mayor población, regar los cultivos, dar de beber a los animales de ganado; y, por supuesto dar de beber a toda la población mundial.
Como consecuencia de eso, el artículo hace un llamado a dar a este problema la importancia que se merece, y buscar una solución que permita asegurar el aprovisionamiento sostenible de este recurso.
Esto también plantea que es posible que hacia futuro los mayores conflictos sociales, políticos y límitrofes estén relacionados con el acceso a las fuentes de agua y su adecuado aprovechamiento.
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