IDEAS
Las amenazas contra los cereales
Un reciente artículo de Grist, denominado “Climate change is making food more toxic”, llama la atención sobre algo que está sucediendo sin que nadie pueda hacer nada para evitarlo. Se trata de los efectos del cambio climático en incrementar la toxicidad en los cultivos de cereales.
Y es que el cambio climático facilita que aparezcan las micotoxinas que terminan siendo peligrosamente venenosas porque son creadas por hongos, y existen estudios que indican que podrían aumentar la probabilidad de padecer algún tipo de cáncer, afectar el sistema inmunológico e incluso matar a la víctima.
Por fortuna, América del Norte, Europa y América Latina casi no tienen casos de muerte por micotoxinas. Sin embargo, la situación es diferente en África, el sudeste de Asia y el oeste del Pacífico, donde los casos se están dando con mayor frecuencia. Precisamente, recientemente la United Nations Environment Programme (UNEP) emitió un comunicado denominado “Toxic Crops and Zoonotic Disease: UNEP Identifies the Emerging Environmental Issues of Our Time”, donde advierte el impacto que está teniendo el cambio climático en la seguridad alimentaria como consecuencia de las sequías y las altas temperaturas que provocan la acumulación de compuestos químicos en los cultivos que son tóxicos para animales y humanos.
Específicamente, la UNEP, se refiere a los cultivos de trigo, cebada, maíz y mijo que se encuentran entre los que más absorben los nitratos que son provocados por la sequía prolongada y que en los animales provoca el aborto voluntario, la asfixia y la muerte. A contrario, la lluvia, también genera la acumulación de otro compuesto tóxico llamado cianuro de hidrógeno o ácido prúsico en cultivos también como el maíz, las cerezas y manzanas.
También advirtió sobre las aflatoxinas de los hongos que causan cáncer y pueden dificultar el crecimiento fetal, las cuales afectan al maíz en zonas con aumento de temperatura. Precisamente, esta es la principal amenaza para la seguridad alimentaria de Europa, en un escenario de incremento de la temperatura de 2°C.
Si bien casi todo lo que comemos puede tener microorganismos o partículas, incluso de metales, existen ciertos niveles de tolerancia para que sean aptos para el consumo humano. Sin embargo, la presencia de micotoxinas podría activar que esta presencia se convierta en una amenaza a la salud.
Publicar un comentario