Cuero de laboratorio

En una nota anterior titulada “Adiós al culto al cuero” dábamos cuenta de las nuevas tendencias sobre el uso del cuero para reducir el impacto para los animales. Sin embargo, hay una empresa que está buscando una nueva alternativa a lo planteado que sigue la corriente iniciada por una empresa que este año presentó la primera hamburguesa hecha sin dañar a un solo animal.

La empresa había conseguido la hazaña cultivando células de vacas en el laboratorio y luego haciendo que estas crezcan para poder ser cocinadas más tarde. Ahora, la empresa Modern Meadow está tratando de hacer algo similar pero con el cuero. El artículo de Seeker titulado “Real Leather Without the Cow”, cuenta cómo se puede producir cuero sin vacas.

Bajo el mismo principio de Memphis Meats (los autores de la hamburguesa al laboratorio), los autores de Modern Meadow están cultivando células de vaca que puedan utilizar específicamente para generar cuero sin dañar a ninguna vaca en el proceso.

Para conseguir esto, la empresa básicamente juega con el ADN de los animales que es editado de tal manera que le diga a las células que solo generen ciertos tipos específicos de proteínas, en este caso básicamente el colágeno que es el que le da a la piel su estructura.

Luego de esto, dejan a las células que se multipliquen como en unas pequeñas fábricas donde se les programa para fabricar ciertas cosas como en una suerte de proceso de especialización biológica.

El colágeno crece y se convierte en fibra, y ésta a la vez continúa creciendo y juntándose hasta que se convierte en piel. A partir de este producto, los diseñadores pueden fabricar guantes, bolsos, zapatos, cinturones, y hasta sillones. Esto significa que cualquier tipo de producto que antes requería cuero puede ser hecho a partir de este material.

Todo esto sin dañar al animal, ni tener que pasar por todos los procesos químicos por los que el cuero pasa normalmente. Usualmente en estos procesos están involucrados niños y jóvenes pobres, los cuales sufren enormes problemas a la salud al estar expuestos constantemente a químicos.

Además, el cuero es personalizable ya que debido a que tienen control sobre qué es lo que crecen en los laboratorios, también pueden modificar la elasticidad, flexibilidad y grosor del cuero que se elabora.

Si bien el proceso es sumamente costoso actualmente, de trasladarnos a esta nueva forma de hacer las cosas los precios bajarían.