De los nuggets de Bolt, al apio de Farris

Una de las cosas que siempre genera interés es saber cómo se preparan los atletas que triunfan en las olimpiadas. Por ello, el tema de la dieta que consumen es un tema que concita la atención de todos.

En Rio, es vox populi que Michael Phelps, el conocido nadador, consume más de 10,000 calorías diariamente, donde incluye todo lo que pareciera estar prohibido para lo que se considera una dieta saludable: huevos, café, tostadas francesas, bacon, carnes, helados, bebidas energéticas, entre otros. Su caso es de aquellos que los médicos ponen como ejemplo de mayor riesgo de diabetes, problemas cardiovasculares u obesidad. Un caso similar es el de Bolt que no puede vivir sin sus nuggets.

Más allá del interés que genera todo lo relacionado a Phelps o Bolt, lo cierto es que el 99.9% de los atletas consume un amplio nivel de proteínas de origen animal.

Por eso, resulta de especial interés conocer que hay atletas que triunfan sin estar en este grupo, y, en deportes inimaginables, según destaca un artículo de Quartz titulado “The only American male weightlifter to compete at the Rio Olympics is vegan”.

Se trata de Kendrick Farris, un levanta pesas que es vegano, con lo cual se comprueba que la fortaleza y la fuerza no necesariamente viene de la proteína animal, sino que puede provenir de las verduras.

Farris, levantó un total de 375 kilogramos, lo cual le permitió ubicarse en el undécimo lugar en las Olimpiadas de Rio.

En una entrevista con The Huffington Post, Farris explicó sus razones para volverse vegano en 2014. En el artículo “Kendrick Farris, The Only Male U.S. Weightlifter In The Olympics, Is Totally Vegan”, el deportista explica que no está de acuerdo con la forma en la que se trata y asesina a los animales para hacerlos comida. Además, afirmó que no confía en la forma en la que se procesa la comida. Pero lo más importante, según la entrevista con el HP, fue el nacimiento de su segundo hijo. Según el deportista, este hecho lo hizo reflexionar sobre quién se estaba convirtiendo como persona y qué ejemplo estaba dándole a sus hijos.

Ahora, con la carne fuera de su alimentación, Farris afirma que consigue todas las proteínas que necesita de la naturaleza. Su realidad vegana no le limita la creatividad al comer. Suele alimentarse de frutas, quesadillas de palta o lasaña de espinaca. Además, afirma que desde que cambió de dieta siente que muchas cosas han cambiado en su cuerpo. Cuenta que ahora su cuerpo se recupera de forma más rápida luego de entrenar, además, su mente está más clara y puede enfocarse con más facilidad.

Alguien podría pensar que sin medallas no es un triunfador, pero en realidad no es así. Ya solo el hecho de calificar para representar a los EE.UU. lo obligó a imponerse a decenas de deportistas que eran completamente carnívoros.