TENDENCIAS
La paternidad y la tecnología
Juan está en la sala de espera del dentista con sus dos pequeños hijos. Debido a su trabajo, durante la semana no tiene tiempo para estar con ellos, pero lejos de aprovechar e interactuar con sus hijos, Juan revisa sus correos en su celular, mientras que los dos pequeños juegan en sus tabletas. Esta es una imagen cotidiana en las familias modernas: todos los miembros inmersos en sus propios mundos a través de sus pantallas táctiles y un nivel de interacción real mínimo o inexistente.
Las nuevas tecnologías han afectado la manera en que las personas se relacionan entre sí, facilitando la comunicación a larga distancia y expandiendo el conocimiento sobre el mundo incluso para aquellos que nunca han salido de sus ciudades. Nunca la humanidad había tenido acceso a tanta información, ni cruzado grandes distancias con tan solo pulsar un botón.
Los alcances revolucionarios de la tecnología afectan cada aspecto de la vida, incluida la paternidad. Aquellos que deciden embarcarse en la misión de ser padres no se desempeñan de la misma forma en que sus padres lo hicieron, pues deben enfrentarse a retos diferentes, empezando por enseñarles a sus hijos a interactuar con otras personas en un mundo de máquinas y dispositivos eléctricos.
Un reciente artículo de Mashable, titulado “Why playing with your child is the most important thing you’ll ever do”, resalta la importancia de la interacción padres-hijos en la era actual.
El artículo plantea que, si bien no se puede desconocer la importancia de la tecnología en estos tiempos, los padres deben buscar un adecuado balance entre admitir su presencia en la vida en familia, y la interacción natural que necesitan los hijos. Los niños necesitan referentes, especialmente durante los primeros años de vida cuando absorben todo el conocimiento e información de las personas que tienen a su alrededor, padres y hermanos fundamentalmente.
Cuando los padres no están presentes buena parte del tiempo por razones de trabajo, la tecnología puede ser de gran ayuda. Sin embargo, incluso elegir cuál usar es importante. Los mensajes instantáneos no pueden reemplazar a una llamada telefónica para escuchar la voz de nuestros hijos
El 80% del cerebro de un niño se desarrolla durante los tres primeros años de vida, periodo fundamental para asegurar el correcto desarrollo físico, mental y emocional de una persona. En este sentido, procurar presencia e interacción continua entre los padres y el niño permitirá que este se desarrolle integralmente como individuo pues le brindará experiencias reales y directas que puede replicar en el futuro.
Los padres pueden recurrir a la tecnología para crear espacios comunes con sus hijos, como ver una película juntos, pero también deben restringir el uso de dispositivos electrónicos en circunstancias particulares como durante la comida, de manera que se propicie la interacción directa y el intercambio de opiniones y experiencias.
Los hijos necesitan a sus padres para aprender y crecer, no una pantalla.
Publicar un comentario