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Más cerca de la vacuna contra el Alzheimer

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Los depósitos de la proteína beta-amiloide (Aβ) fueron descubiertos hace 25 años como catalizadores de la enfermedad.
07 de septiembre de 2016
Red star
Por qué es importante
Los depósitos de la proteína beta-amiloide (Aβ) fueron descubiertos hace 25 años como catalizadores de la enfermedad, ya que causan disfunción sináptica y degeneración neurológica.

Cada vez que se anuncia una nueva droga para luchar contra el Alzheimer, inmediatamente se genera interés por conocer los detalles que están detrás del anuncio que podría mejorar los síntomas de una de las enfermedades más duras que puede sufrir una persona.

En nuestra nota titulada “¿Vacuna contra el Alzheimer?”, dimos cuenta que un grupo de científicos había creado una vacuna que podría ayudar a mejorar los síntomas del Alzheimer.

Ahora, un nuevo estudio titulado “The antibody aducanumab reduces Aβ plaques in Alzheimer’s disease” y publicado en Nature y sobre el que da cuenta un artículo de IbTimes titulado “Treatment for Alzheimer's a step closer as trial shows promising results in reducing amyloid plaques”, analiza los resultados de una nueva terapia, la cual utiliza las mismas bases que la vacuna informada previamente.

Si bien los depósitos de la proteína beta-amiloide (Aβ) fueron descubiertos hace 25 años como catalizadores de la enfermedad, ya que causan disfunción sináptica y degeneración neurológica, todas las vacunas que se han creado para luchar contra ellos no han dado los resultados esperados. Por ello, cada nuevo intento es noticias porque genera esperanzas para encontrar una verdadera cura para esta enfermedad.

En este nuevo estudio se suministró la medicina, conocida como “aducanumab”, por 12 meses a un grupo de ratones y a otro se le dio un placebo. Los resultados señalaron que la terapia funcionaba y era capaz de remover los depósitos de beta-amiloide del cerebro de los ratones. Estos resultados fueron recibidos con cautela, ya que los científicos creen que se necesitan pruebas en humanos para poder estar verdaderamente optimistas con el asunto.

Sin embargo, también se encontraron algunos efectos secundarios al tratamiento. Casi 40 de los ratones de prueba debieron ser retirados debido a que se aumentó el riesgo de provocarles hemorragias en el cerebro. No obstante, ninguno de los ratones llegó a desarrollar el problema, sólo aumentaron las posibilidades de que se presente la hemorragia, por lo que los científicos siguen optimistas. Sin embargo, señalan que investigarán este asunto con rigurosidad.

Ojalá que las nuevas investigaciones confirmen estos hallazgos y finalmente estemos frente a la cura contra esta enfermedad tan degenerativa para los seres humanos.

Desde Oe.pe seguiremos difundiendo todas las investigaciones que se publiquen sobre la enfermedad.