PERSONAS
Las condolencias en la era digital
Las redes sociales, por más beneficiosas que hayan resultado en muchos aspectos de nuestra vida, también han conseguido que nos volvamos distantes de las personas que nos rodean. Antes, se solía llamar o visitar a los amigos cuando cumplían años. Hoy, hemos reducido nuestro saludo a un sencillo mensaje en Facebook.
Lo terrible es que esto también está ocurriendo en situaciones de pérdida o duelo de alguien. Y hemos llegado a creer que dejar un comentario en Facebook expresando lo que sentimos es suficiente.
Las personas necesitamos del calor humano y tiene que quedar claro que un sinfín de mensajes positivos en nuestro Facebook o en Whatsapp no van a hacer que nos sintamos acompañados y mejor luego de la muerte de un ser querido. El problema con esta costumbre es, además, que, si deseamos hablar con alguien respecto a la muerte de alguien cercano, no sabemos cómo hacerlo.
Por eso resulta ilustrativo un artículo de New York Times, titulado “The Art of Condolence” que recopila una serie de consejos para los perdidos en la era digital.
La falta de experiencia puede hacernos sentir que no estamos preparados para hablar con alguien. Sin embargo, podemos estar tranquilos porque no saber qué decir está bien. Nadie es repentinamente un orador motivacional de primera, en lo que dolor respecta, la intención siempre triunfa sobre palabras bien elegidas y frases bonitas. Esto lleva también a resaltar que en lo posible se debe evitar el cliché.
Además de esto, es siempre bueno compartir una memoria positiva que involucre al ser querido. Kevin Young es un poeta que escribió una antología de poemas llamado “The Art of Losing” en el cual trata de expresar lo que siente por el fallecimiento de su padre. Gracias a su libro, muchas personas que lo habían conocido le contaron cómo había influenciado en su vida, lo que hizo que sintiera que su padre había traído felicidad a varias personas y lo ayudó bastante.
Por otro lado, debido a otro fenómeno cultural, a las personas no les gusta usar la palabra muerte o los términos relacionados con ella. Sin embargo, muchas veces es mejor ser franco y no tener miedo a llamarle a las cosas como son. Esto puede ayudar a que las personas que han perdido a alguien vivan en la realidad y no se queden en frases bonitas pero que no significan nada.
Finalmente, es importante señalar algo que se debería haber aprendido a este momento: Facebook ni ninguna red social es suficiente. Las interacciones son parte de la vida de una persona, no podemos vivir encerrados enviándonos mensajes para consolar a alguien por la muerte de alguien importante.
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