Yemi Kale: el hombre de las estadísticas claras

Durante el largo periodo de gobierno de los Kirchner en Argentina, uno de los cuestionamientos que se les hacía es que maquillaban las estadísticas para mostrar que la economía iba mejor de lo que realmente estaba pasando.

Esta práctica no ha sido ajena a otros países. Un caso que hoy llama la atención es el de Nigeria, donde durante años se vivió una especie de bonanza económica, como consecuencia de que el precio del petróleo estaba elevado y el dinero fluía de manera activa.

Sin embargo, dentro de la Oficina Nacional de Estadística de Nigeria (Statistician general of the National Bureau), un empleado elaboraba cuadros donde los números advertían que las cosas no iban tan bien como se pensaba. Sin embargo, sus jefes no publicaban estos números por miedo a que dejar mal al gobierno, según advierte un artículo de Financial Times, titulado “The statistician who doubled Nigeria’s economy overnight”, sobre el que se basa esta nota.

Hoy día, Yemi Kale, ese empleado que llevaba sus cálculos de un lugar a otro esperando ser escuchado es el jefe del National Bureau of Statistics, quien asumió esa posición en 2011 y ha vuelto a ser reelegido para la misma en 2016. Durante su gestión se recalculó el PBI de Nigeria que la hacía aparecer con un crecimiento 89% más grande de lo que era y para mostrar las cifras tal como eran.

A pesar, que no siempre da buenas noticias, se ha ganado el respeto de los ciudadanos que lo alaban.

Y es que trata de ser sumamente didáctico con el pueblo nigeriano. Por eso siempre brinda información en infografías y formatos sencillo, pero además, siempre les dice la verdad sobre cómo va el país.

Cuando se le pregunta cómo fueron sus primeros años, lo primero que señala es que se encargó de limpiar una situación desastrosa.

La institución no basaba sus estimaciones en información de campo y no iba a recoger datos de los lugares más remotos del país. Además, el gobierno creaba proyectos enormes los cuales eran imposibles de construir y los trabajadores de la institución estaban acostumbrados a publicar los números que les parecían.

Kale cambió todo esto y, al hacerlo, cambió la economía y la forma en la que el país funciona. Sin duda un ejemplo a seguir.