La depresión y los problemas fisiológicos

La depresión y la ansiedad han tenido problemas para ser reconocidas como enfermedades reales. Esto se debe a que, durante mucho tiempo, se creía –y en algunos lados se sigue creyendo- que estar deprimido es una opción y no una enfermedad de salud mental. Pero, esta forma de pensar no está nada cercana a la realidad.

La gente deprimida, al igual que la gente ansiosa, sufre de problemas mentales y para poder atacarlos necesitan la ayuda de un experto. No se trata de simplemente pensar en “cuánto quisiera dejar de estar deprimido” para poder conseguirlo. Pero, resulta que además de los problemas propios de una enfermedad mental, estas personas serían más vulnerables a problemas fisiológicos, afirma el artículo de ZME Science, titulado “Depression and anxiety cause stomach and skin issues, respectively”.

Hasta el momento, el número creciente de estudios en torno a estos temas había determinado que estas condiciones también traían consigo problemas como sentirse constantemente cansado, dormir mal, falta de apetito, palpitaciones, mareos, dolores de barriga, dolores de cabeza y otros.

Sin embargo, un nuevo estudio realizado por la doctora Marion Tegethoff y el profesor Gunther Meinlschmidt de la Universidad de Basel, ha encontrado que hay más síntomas de lo que se creía.  El estudio, que se basó en un seguimiento a 6,483 jóvenes de entre 13 y 18 años, encontró que las personas que habían tenido alguna clase de problema mental eran más susceptibles a problemas fisiológicos que el resto de las personas.

Sin embargo, hay muchas cosas que aún no están claras. Efectivamente, el estudio demostró que en esa muestra las personas que habían tenido algún tipo de problema mental como depresión o ansiedad estaban más predispuestos a sufrir problemas de tipo físico. Sin embargo, el estudio señala que probablemente se trate de un caso de correlación y no de causalidad. Esto es, que la enfermedad en sí no causa que estos problemas fisiológicos se manifiesten, sino que, más bien, hacen que la persona sea más susceptible a que lo hagan.

Los encargados del estudio afirmaron que es necesario seguir investigando el tema, ya que podría haber respuestas muy serias respecto al caso. Averiguarlas podría ayudar mucho a seguir construyendo una imagen más real de los problemas mentales para tratar de eliminar el estigma social que los hace ver como un problema pequeño y poco serio.