Animales genéticamente modificados

Uno de los temas más controvertidos que ha provocado la ciencia tiene que ver con los alimentos genéticamente modificados (GMO). Si bien distintos estudios encuentran que no hay nada de malo con ellos, los seres humanos siguen desconfiando de estos productos y prefieren comprar sus versiones convencionales o “naturales”.

Existe menos información sobre los animales genéticamente modificados, pero probablemente generarían el mismo rechazo.

Lo que pocos saben es que los animales GMO, no son usados únicamente para la alimentación de la especie, si no, también para el desarrollo de nuevas medicinas en caso de enfermedad o de epidemias. Actualmente, el último animal que ha sido aprobado por la Food and Drug Administration (FDA) estadounidense es la vaca, afirma el artículo de The Verge, titulado “Are these genetically engineered cows the future of medicine?”, sobre el que se basa esta nota.

La FDA, anteriormente, había aceptado la creación de cabras genéticamente modificadas en el 2009, la cual se buscó que produzca leche capaz de prevenir la formación de coágulos mortales. Luego, en el 2014 se aceptó la creación de conejos modificados de cuya leche se extraían medicamentos para prevenir hinchazones que podían resultar mortales. Finalmente, el año pasado se aprobó la creación de aves modificadas, cuyos huevos prevenían una condición extraña en la cual el cuerpo no es capaz de separar la grasa.

Ahora, las nuevas vacas modificadas tienen la capacidad de crear anticuerpos capaces de resistir ciertas enfermedades epidémicas. Por ejemplo, se les inyecta el virus del ébola y se espera que creen los suficientes anticuerpos para combatirla, para luego extraer el plasma de la sangre, del cual luego se extraen anticuerpos para el ser humano.

Esto ha sido posible recientemente, con los nuevos avances en la tecnología y ciencia genética. Antes, debido a que los animales tienen anticuerpos propios de su respectiva especie, estos podían generar resultados negativos para los seres humanos. Sin embargo, ahora se modifica al animal para que sus anticuerpos sean aptos para el ser humano.

Además, los anticuerpos producidos por las vacas modificadas son policlonales, lo cual significa que pueden atacar múltiples sectores enfermos del cuerpo a la vez. Esta es la forma en la que los anticuerpos humanos funcionan y sólo pueden ser producidos por seres vivos.

Al igual que con los alimentos GMO, existen muchas dudas respecto a los efectos de los animales modificados. Actualmente, las vacas se encuentran en periodo de prueba, pero quién sabe, quizás tenemos ante nosotros el futuro de la medicina.

Queda esperar a ver los resultados que se obtengan con el tiempo.