Israel: del conflicto a los startup

Una de las cosas que suele suceder cuando un país está en constantes conflictos religiosos, políticos, fronterizos, entre otros, es que orienta parte de sus recursos materiales y humanos para prepararse para afrontar de la mejor manera posible los mismos.

El caso de Israel no es ajeno a esta realidad. Precisamente, un reciente artículo de Bloomberg, titulado “How the Constant Threat of War Shaped Israel’s Tech Industry”, señala lo bien que ha capitalizado Israel la inversión que se ha hecho en desarrollar tecnología para afrontar los conflictos en los que está enfrascado hace muchos años.

Israel cuenta con la Unidad 8200 (Unit 8200, en inglés), una rama de élite de las Fuerzas de Defensa Israelíes (Israel Defense Forces, por sus siglas en inglés) que se especializa en seguridad electrónica. Más allá de los proyectos desarrollados por la Unidad 8200 para sus acciones de espionaje y ciberataques, lo más interesante es que muchos de los que han salido de este grupo de élite, han terminado creando startups multimillonarios de tecnología.

En otras palabras, más allá de las diferentes tecnologías creadas en un entorno de guerra para la guerra, lo interesante del caso es la capacidad de Israel de transformar a soldados en empresarios de éxito. Es más, en estos momentos, Israel vive uno de los mayores crecimientos tecnológicos del mundo. Actualmente, el país tiene unos 5,500 startups, además de 1,400 que se sumaron el año pasado. Parte de ellos, son Consumer Physics, compañía que se dedica a analizar objetos de todos los días para contar historias de cómo se hacen; SpacePharma, la cual se enfoca en encontrar formas de desarrollar medicinas en el espacio; y Umoove, la cual lucha por crear un ambiente donde la tecnología prospere en medio de tantos conflictos religiosos y políticos.

Si bien en distintas zonas de Israel se observan huellas de los conflictos que son símbolos que representan la memoria de un país que no termina por lograr la paz con sus vecinos, en el fondo se trata de un país donde se celebra la vida y el desarrollo del conocimiento. Es un lugar lleno de música, energía y colores.

Más bien hay que decir que a pesar que Israel es un país envuelto en conflictos, ha conseguido lo que muchos no han podido alcanzar: imitar el entorno conseguido en Silicon Valley y convertirse en una plataforma de nuevos “unicornios” tecnológicos.