LEGO dejará de usar plástico

A fin de año en París, 40 mil personas se volverán a reunir alrededor de la 21ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP21), para intentar definir un acuerdo universal y vinculante que permita luchar eficazmente contra el cambio climático e impulsar la transición hacia sociedades y economías más resilientes y bajas en carbono.

En el marco de dicho evento, cientos de empresas industriales del mundo plantearán compromisos en esa misma línea: ser eco amigables, invertir en tecnologías agua cero, reducir sus niveles de combustión, entre otros.

Sin embargo, es probable que pocas de ellas tengan un impacto directo en nuestras vidas que nos haga sentir de cerca esos compromisos. Por eso, ha generado tanto interés, el anuncio que acaba de hacer LEGO de que invertirá USD 1000 millones en un Centro de Materiales Sostenibles para que su producción sea una de las más respetuosas del medio ambiente en 2030.

Y es que LEGO es conocido en todo el mundo, incluso en Africa donde hoy se utilizan metodologías educativas que implican el uso de sus conocidos ladrillos. Por eso, que dicha empresa anuncie que ha tomado la decisión de dejar de usar plástico para reducir aún más su huella de carbono, tiene un significado especial.

La empresa que produce los juegos con los que muchos hemos aprendido a armar carros, aviones, casas, muñecos y robots, entre otros; investigará, desarrollará y aplicará nuevos materiales que le permitan usar materias primas sostenibles en la fabricación de sus piezas, así como en sus materiales de embalaje.

Para viabilizar su iniciativa parte de la tarea es que el Centro que ha creado impulse asociaciones con todos los expertos en materiales alrededor del mundo.

El presidente de la empresa, Jorgen Vig Knudstorp, sostiene que la empresa ya ha estado reduciendo su huella de carbono, al reducir el tamaño de sus envases, usando aquellos que tienen certificación FSC, o con su inversión en el parque eólico marino. Sin embargo, hasta ahora, no había enfocado su propósito desde el lado de los materiales.

LEGO usa aproximadamente 6 mil toneladas de plástico llamado acrilonitrilo butadieno estireno para fabricar sus ladrillos de juguete, por lo que el cambio a ser más eco amigable es todo un desafío.

En el futuro cercano, cada vez que un niño lea en el envase de la caja de LEGO que los ladrillos con los que juega son amigables con el medio ambiente, constará la importancia de que los materiales que se utilizan para cualquier tipo de construcción sean amigables con el medio ambiente.