TENDENCIAS
Israel y las viviendas en territorio prohibido
Las disputas en el Medio Oriente son un tópico bastante conocido por las personas alrededor del mundo. Cuando se cree que los problemas están llegando a su fin, una nueva situación de presenta y todo vuelve a desarrollarse de la misma manera caótica que siempre.
Esta vez se trata de la construcción de un gran número de asentamientos por parte del gobierno israelí en la región conocida como Cisjordania, territorio ubicado en la frontera oeste de Israel y considerado como “ocupado” ya que no le pertenece oficialmente a ningún gobierno. De acuerdo a un artículo de The Washington Post, titulado “Israel plans West Bank settlement expansion amid policy shift in Washington”, la decisión del gobierno israelí habría sido impulsada por Donald Trump y ha sido tomada por Palestina como una provocación.
En diciembre de 2016, representantes de las Naciones Unidas votaron a favor de detener la construcción de asentamientos humanos en Cisjordania por parte de Israel. Como resultado, tales acciones fueron calificadas de ilegales y se ordenó el cierre permanente de los proyectos que se venían llevando a cabo desde 1967. Pero esto no ocurrió. Por el contrario, nuevos informes afirman que las construcciones continúan hasta el día de hoy. Recientemente, el gobierno israelí autorizó la edificación de 2,500 unidades habitacionales en asentamientos judíos de la zona en cuestión. Esto ocurre luego de que el Primer Ministro, Benjamin Netanyahu conversara con el presidente Donald Trump, quien habría mostrado su apoyo, mencionando incluso su intención de mudar la embajada norteamericana a Jerusalén. Como se sabe, esta ciudad es considerada la capital de Israel, así como del llamado Estado Palestino.
Si bien es cierto que Netanyahu ha manifestado que la decisión se basó en la necesidad de los pobladores judíos de tener un lugar donde vivir, las consecuencias políticas podrían impactar, no solo a Palestina e Israel, sino también en el propio Estados Unidos. De acuerdo a The Washington Post, alrededor de 100 unidades habitacionales se construirían en Beit El, asentamiento apoyado por David Friedman, elegido por Trump para ser el próximo embajador en Israel.
Por su parte, un vocero del presidente palestino, Nabil Abu Rudeineh, mencionó los planes de Israel como un intento por socavar los esfuerzos de paz en el Medio Oriente y promover el extremismo. Esta opinión ha sido replicada por otros representantes políticos de Palestina.
Tal parece que el gobierno israelí no tiene planes de dar marcha atrás en la construcción más importante, en términos de magnitud, desde 2014 a pesar de las posibles consecuencias que esto pueda tener. Sin embargo, se espera que ambas partes sean capaces de llegar a un acuerdo antes de que esta situación agrave los conflictos en la zona.
Publicar un comentario